La Casa Gris llevó a cabo ayer el primer paso del anunciado sinceramiento de lo
que paga a los funcionarios políticos al eliminar una restricción impuesta por la administración
anterior al sueldo del gobernador que regía desde la última discusión paritaria del año pasado. El
decreto derogado ordenaba que el aumento salarial del 100 por ciento otorgado a los empleados
públicos fuera reducido a sólo el 20 por ciento en el caso del gobernador y los funcionarios de más
alto rango. Al dejarse sin efecto esa restricción, el salario del mandatario pasó automáticamente
de poco más de 7.000 a 10.992 pesos exactamente.
Con esta última cifra, el gobernador Hermes Binner verá su
sueldo sometido a la discusión paritaria que se abrirá, según se estima, en la segunda quincena de
este mes, en una definitiva etapa del sinceramiento. En otras palabras, recibirá el aumento que
entonces se decida para toda la escala salarial que, al decir del propio mandatario, estará "por
encima del 10 por ciento y por debajo del 30". Desde entonces se convertirá en el sueldo testigo y
tope de la escala salarial pública, conforme la idea de blanqueo con que llegó a la gestión la
administración socialista.
A los 10.992 pesos del sueldo máximo deberá sumarse la
cifra de 2.400 pesos en concepto de gastos. La cifra de 12.392 pesos es inferior a los 14.000
inicialmente programados que fueron reducidos en las últimas horas por el propio Binner quien,
trascendió, no quiere irritar a la población con un aumento salarial ni dar argumentos para que se
hable de salariazo.
Precisamente ese término fue usado por algunas
publicaciones en la primera semana de enero, cuando el ministro de Gobierno y Reforma del Estado,
Antonio Bonfatti, anunció la intención de sincerar los salarios del funcionario provincial y que el
del gobernador oficie de tope dado que se habían detectado salarios pagados por mismo Estado
provincial que superaban en más del doble a lo percibido por el mandatario. Con la caída de la
restricción que pesaba sobre ellos, los sueldos de los ministros se ubicaron en los 9.754 pesos y
desde tal cifra participarán de la paritaria pública.
El 6 de enero último este diario afirmó que en la
Secretaría de la Función Pública calculaban que un sueldo realista para el gobernador debería
rondar entre 14 y 15 mil pesos. A esa cifra se acercan bastante los casi 12.400 pesos conformados
de sumar el sueldo de 10.992 pesos más el reconocimiento del monto destinado a gastos (120 pesos
diarios) que, cabe recordar, rige desde hace muchos años y sólo por 20 días al mes.
En otras palabras, para el gobernador, ministros,
secretarios y subsecretarios, de multiplicar 120 pesos por 20 días, surgen los 2.400 pesos más
arriba referidos que permiten extender los ingresos del gobernador a los 12.400 pesos. O el ingreso
de un ministro en ($9.754 + $2.400) 12.154 pesos.
En síntesis, el sueldo actual del gobernador es de 10.992 pesos (su
ingreso, de 12.400). Luego de realizada la paritaria quedará consolidado como el salario más alto y
testigo de la administración pública, en una cifra que oscilará entre las siguientes: 12.201 pesos,
surgida de sumarle a 10.992 pesos un 11% como piso de aumento, y 14.700 pesos, si se le suma un 29%
de incremento. l