El PRO y el radicalismo celebraron ayer el triunfo obtenido en los comicios municipales de Marcos Juárez y, si bien volvieron a desestimar una alianza a nivel nacional para los comicios 2015, auspiciaron la posibilidad de un acuerdo en Córdoba.
El PRO y el radicalismo celebraron ayer el triunfo obtenido en los comicios municipales de Marcos Juárez y, si bien volvieron a desestimar una alianza a nivel nacional para los comicios 2015, auspiciaron la posibilidad de un acuerdo en Córdoba.
"Estoy muy contento. Más que por el resultado electoral, por lo que está pasando. Es un paso muy grande para aquellos que creemos que es necesario un cambio en la Argentina lo que pasó ayer", destacó el jefe de Gobierno porteño y precandidato presidencial, Mauricio Macri, quien viajó a la ciudad del sur cordobés para compartir el triunfo de Pedro Dellarossa.
Tras la victoria del candidato a intendente por el frente UCR-PRO, Pedro Dellarossa, con un 36,48 por ciento de los votos, Macri dijo que en esa ciudad cordobesa se llegó a un acuerdo con otras fuerzas porque estas "creyeron en la propuesta" de su espacio.
Vocación. También expresó su satisfacción el titular del radicalismo y aspirante a la presidencia por el Frente Amplio Unen (FAU), Ernesto Sanz, quien enfatizó que "el radicalismo formó parte de eso porque tiene vocación frentista y ganadora", pero aclaró que "esto estuvo solamente vinculado a Marcos Juárez.
Desde el gobierno nacional, el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich, minimizó la victoria obtenida por la coalición opositora al considerar "de carácter local" el resultado que obtuvo el espacio que conduce Macri a nivel nacional.
Los comicios de Marcos Juárez funcionaron como un primer test para ambos partidos, pero desde ninguno de los dos sectores impulsaron su traslado al ámbito nacional.
En ese contexto, Macri recordó que los radicales "están trabajando en la idea de Unen y nosotros creemos en lo que hemos marcado, que es una tercera vía".
En igual sentido se pronunció Sanz, quien insistió con que "no hay que extrapolar lo de Marcos Juárez a ningún otro lugar" y manifestó que "esto de ninguna manera tiene que ver con nuestra construcción nacional".
"Ha sido una gran victoria. Lo que se ha votado en Marcos Juárez es un cambio: ha sido derrotado el oficialismo municipal, que ha tenido una muy mala performance electoral", precisó.
Deseos. Según el legislador, "lo que la sociedad de Marcos Juárez ha adelantado es lo que yo veo en todos los rincones de la Argentina: una gran necesidad de cambio, un gran deseo de cambio que se expresa muchas veces con gran malestar y rechazo cuando uno escucha a los ciudadanos".
Sanz opinó que "el radicalismo de Córdoba está en condiciones de liderar un proceso de cambio en esa provincia" y que "el mapa de las gobernaciones en la Argentina el año que viene va a cambiar sustancialmente y en ese mapa los candidatos del radicalismo se van a alzar con varias gobernaciones".
De todas formas, insistió en que la experiencia de Marcos Juárez no es trasladable al resto del país, donde la UCR mantiene el acuerdo con sus socios del FAU.
No obstante, el diputado cordobés Oscar Aguad (UCR) avanzó más allá de Marcos Juárez y evaluó que el resultado "en Córdoba significa que el frente Unión Cívica Radical-PRO es un hecho que se va a concretar el año que viene".
También se entusiasmó el senador por el Frente Cívico Luis Juez, quien instó a los dirigentes de la oposición a dejar de lado las "mezquindades" y "construir una alternativa para el país" de cara al 2015, tomando como ejemplo la alianza entre PRO y UCR que le ganó al peronismo a nivel municipal.
"Es una buena experiencia para repetir o copiar para cualquier otro lugar del país y también un buen ejemplo para el país", sostuvo Juez al ratificar el apoyo de su sector al intendente electo.
Juez no disimula sus desacuerdos con la estrategia política que viene desarrollando el FAU y ya anticipó que el partido que fundó, el Frente Cívico, buscará alianzas con el PRO.
Mentiras
El diputado provincial Maximiliano Pullaro (UCR) desestimó una posibilidad de una alianza con el PRO tanto a nivel provincial y nacional, como lo vienen sugiriendo algunos dirigentes radicales. “Nosotros no le podemos mentir a la sociedad pretendiendo ser algo que no somos, con el único objetivo de sumar votos. La confluencia de la UCR y el PRO sería mentirle a la gente”.