El juez federal Sebastián Casanello rechazó el pedido de detención para los hijos del empresario Lázaro Báez y el asesor financiero Fabián Rossi, que había solicitado la Unidad de Información Financiera (UIF) en el marco de la causa conocida como la ruta del dinero K.
Casanello se respaldó en el dictamen del fiscal Guillermo Marijuan, quien estimó que los acusados "han cumplido con las obligaciones y citaciones dispuestas por el tribunal, demostrando su voluntad de sujetarse al proceso y, en consecuencia, indicó que no se exteriorizan razones suficientes para habilitar el poder punitivo del Estado a restringir la libertad ambulatoria".
La UIF ya había pedido el año pasado la detención de los hijos de Báez y también habían recibido una negativa.
Anteayer Leandro Báez fue el primero de los hijos de Báez en desfilar ante Casanello en la nueva tanda de indagatorias en donde se les informa de la acusación del lavado de dinero conectado con los negocios de la obra pública, por los que ya fue procesada la ex presidenta Cristina Fernández como jefa de una asociación ilícita que integraron distintos funcionarios de su gobierno y el propio Báez.
En otra causa, Los Sauces, la ex presidenta fue procesada por la misma figura junto a ex funcionarios, Báez, sus hijos, Cristóbal López y su entorno, por entender que el alquiler de propiedades a la familia Kirchner fueron retornos por esa obra pública concedida, que habría sido "lavada" a través de distintas cuentas en el exterior.
Al declarar, Leandro Báez dejó en claro que no estaba al tanto de los negocios de su padre, como había hecho otras veces.
Casanello interrogará la semana próxima a sus hermanos: Luciana esta citada el martes, Melina el miércoles y Martin, el jueves.
En ese marco, "hay una incorporación de una nueva prueba fundamental al legajo: la respuesta parcial de las autoridades de Suiza al pedido de cooperación librado en el marco de esta investigación", advirtió el magistrado al reseñar que llegó al juzgado un sobre con un "pen drive" con información encriptada.
Estos datos conforman un informe remitido al juez por la UIF el año pasado que daba cuenta de la existencia de cuentas con unos 20 millones de dólares depositados a nombre de los hijos de Báez en Suiza, motivo por el cual el juez ya los indagó el año pasado.