El ministro de Trabajo nacional, Jorge Triaca, les pidió ayer "prudencia" a los sindicalistas frente a las amenazas de paro, mientras que el jefe de la CTA Autónoma, Pablo Micheli, aclaró que el sector que representa "nunca" hace huelgas "contra un gobierno o un presidente".
Luego de sendas reuniones que mantuvo con los referentes de la CGT y de la CTA, Triaca cuestionó que algunos dirigentes "buscan politizar" esos encuentros y que asistieron a los mismos "con lo que iban a salir diciendo de antemano".
Triaca también confirmó que a fines de septiembre presentarán el proyecto para modificar las escalas del impuesto a las ganancias, al destacar que "hay que cuidar el financiamiento del Estado, pero también el bolsillo de los trabajadores".
"No creemos que haya un agitación de la situación social por sí misma. Vemos que existe una acción política tratando de plantear cosas que no son las que la mayoría de la gente está sintiendo", afirmó Triaca.
El ministro sostuvo que "la conflictividad social tiene su origen en el estancamiento de la economía argentina de los últimos cinco años", cuando "no ha crecido el nivel de empleo y sí la población".
El funcionario destacó que el gobierno de Mauricio Macri tiene "vocación de diálogo" frente a los reclamos del sector sindical, pero cuestionó que "algunos ya venían (a las reuniones) con lo que iban a salir diciendo de antemano".
"Más allá de encontrarnos, hay algunos que tienden a politizar las reuniones", reprochó Triaca, quien insistió en que "el diálogo es bueno con la mayoría de los dirigentes y se ha cambiado ese paradigma".
En ese sentido, indicó: "Me gustaría ver a dirigentes mucho más propositivos, que nos propongan cómo solucionamos el problema del empleo joven o cómo la Argentina gana mercados".
En tanto, Micheli resaltó que en su diálogo con el gobierno de Cambiemos, a través de Triaca, se "hace mucho hincapié con la herencia recibida".
Y aclaró: "Nunca hacemos paro en contra de un gobierno o un presidente, porque defendemos el sistema democrático".
"Estamos preocupados por una situación que no se avizora que vaya a mejorar, porque con la tasa de interés tan elevada, es un gran negocio con el sector financiero y no con el productivo. No existe posibilidad de generar trabajo genuino y digno sin desarrollo industrial", añadió Micheli.