En una desprolija conferencia de prensa en la puerta de la sede rosarina de la
Federación Agraria Argentina (FAA), los presidentes de las entidades del agro que encabezarán hoy
el acto en el Monumento a la Bandera no quisieron adelantar las medidas que adoptarán en el
conflicto que mantienen con el gobierno. "Mañana (por hoy) vamos a plantear cómo seguimos, es lo
único que le podemos decir a estas horas", dijo Eduardo Buzzi, acompañado por el presidente de CRA,
Mario Llambías, y de la Sociedad Rural, Luciano Miguens.
En un breve contacto con la prensa, tras cuatro horas de deliberaciones en la
planta alta de la Federación Agraria, Buzzi sólo se limitó a recitar el Billiken de Belgrano y la
importancia de realizar un acto en el Monumento a la Bandera como símbolo de la patria. La única
frase de cierto tenor que se le escuchó al dirigente pareció arrancada con fórceps. "Esperemos que
el lunes los ministros pongan sobre la mesa lo que tienen que poner", dando a entender que ese día
proseguirán las negociaciones con el gobierno y que se incluyan en el temario las retenciones
móviles, medida oficial que disparó el conflicto con el agro.
La mesura de las declaraciones de los dirigentes rurales puede ser interpretada
en dos líneas concordantes. Por un lado, no apurar una definición altisonante que haga peligrar la
continuidad de las negociaciones con el gobierno; por otro, no quedar en el Monumento a merced de
la ira de las denominadas "bases agrarias", capitalizadas por Alfredo De Angeli, quien se ha ganado
la simpatía de ese sector inorgánico a fuerza de un discurso llano y explosivo.
De hecho, De Angeli fue confirmado como uno de los oradores en el acto del campo
por el sector de los autoconvocados, a pesar de estar enrolado en la Federación Agraria. Buzzi,
Llambías, Miguens y Fernando Gioino, de Coninagro, ausente ayer en la reunión de Rosario,
completarán la lista de los discursos.
A pesar del hermetismo que envolvió el cónclave agrario, LaCapital pudo saber
que Federación Agraria acordó con los autoconvocados que domina De Angeli, que el lunes estos
chacareros permanezcan al costado de las rutas esperando el resultado de las negociaciones con el
gobierno. "De esto dependerá la metodología de la protesta", dijo la fuente consultada.
Buzzi dijo que en la reunión, de la que participó además una veintena de
dirigentes agrarios, se fue "ajustando" el mensaje político que hoy darán desde la tribuna. También
se refirió al acto que el gobierno nacional armó en Salta, que se realizará apenas termine la
manifestación en el Monumento. "Ese dato no nos es ajeno", añadió.
El presidente de Federación Agraria se mostró seguro de la masividad del acto y
dijo que lo que se vivirá hoy en Rosario es la confirmación de la unidad que viene mostrando el
campo con los sectores urbanos. "Va a ser el acto más importante en décadas", dijo.
A su turno, Llambías también sacó el manual escolar sobre la simbología de
Belgrano y el Monumento a la Bandera, y mencionó la característica federal de la protesta ya "que
participará gente de todas las provincias".
Miguens fue el único que no mencionó a Belgrano y la bandera para esquivar las
definiciones políticas. Dijo que la mesa de enlace (que agrupa a las cuatro entidades) está en
estado de sesión permanente. "La lucha continúa", aseguró, al responderle a un chacarero medio
exaltado que asomaba el cogote por encima del enjambre de periodistas y les advertía a los
dirigentes: "¡Miren que esperamos hasta el lunes, y no esperamos más!".
Mientras los dirigentes daban por concluida la conferencia y se aprestaban a
subir a seguir deliberando, otro grupo de chacareros comenzó a vivar a De Angeli, quien no bajó
junto con los dirigentes. "Alfredo, Alfredo", gritaba este grupito autoconvocado. El clamor surtió
su efecto: el combativo dirigente apareció y charló unos minutos con sus fans agrarios.
Hoy, en el Monumento, se verá si De Angeli se disciplina y acepta no patear el
tablero con su verba inflamada para que el campo se encamine a una nueva negociación con el
gobierno.