El ministro de Defensa, Agustín Rossi, recuerda con una mezcla de orgullo y humor su sorprendente ascenso dentro del espacio kirchnerista cuando en 2005 pasó de ser “un desconocido concejal de Rosario” a presidente del bloque de diputados nacionales del Frente para la Victoria, y atribuye ese salto a un “buen discurso” que dio en aquel año ante los entonces presidente Néstor Kirchner y diputada Cristina Fernández.
El actual titular de la cartera militar y durante ocho años principal espada del kirchnerismo en la cámara baja, confesó a Noticias Argentinas que jamás le preguntó a Néstor y Cristina Kirchner los motivos de su elección para presidir el bloque de Diputados y trazó una analogía con el fútbol: “Cuando te ponen de titular en el equipo no preguntás y cuando te sacan tampoco”.
-¿Cómo logró pasar de presidente del Concejo Deliberante de Rosario a presidente del bloque de diputados nacionales?
-Yo era solo relativamente conocido en Rosario y desconocido en la provincia. Algunas opciones que estaban antes no se concretaron y Néstor me conocía porque en mi sector del PJ trabajamos para su candidatura en esa campaña de 2003. El único concejal de Rosario que apoyaba la candidatura de Néstor era yo. Esa situación me permitió dar el paso previo que fue encabezar la lista de diputados nacionales por Santa Fe en la campaña de 2005.
-Se dice que Kirchner lo eligió para la jefatura de bloque por su capacidad oratoria.
-Néstor y Cristina tomaron la decisión de que la campaña para las legislativas de 2005 se lanzara en Rosario adonde fueron todos los candidatos a diputados y senadores nacionales en el acto que se hizo en el estadio cubierto de Newells en el que hubo dos oradores: Cristina (que era candidata a senadora por Buenos Aires) y yo. Dicen que en ese acto hice un buen discurso. Pudo haber sido eso o la intuición de Néstor y Cristina.
-¿Recuerda cuando le comunicaron su designación?
-A Santa Fe siempre le correspondía la vicepresidencia primera o segunda (del bloque de diputados nacionales), pero en una reunión el entonces jefe de Gabinete, Alberto Fernández, y Néstor me dijeron que pensaban en esa alternativa pero también en la presidencia del bloque. En otra reunión, unos 20 días antes de asumir, me convocaron a otra reunión en la que estaba también Alberto Balestrini, que iba a ser presidente de la cámara, y ahí me comunicaron la decisión.
Por Tomás Barrandeguy