Dos oficiales y cinco suboficiales del Ejército Argentino fueron suspendidos debido a al misterioso "faltante" de 26 mil balas de calibre 9 milímetros en el Batallón de Arsenales 603 "San Lorenzo", en Fray Luis Beltrán.
Dos oficiales y cinco suboficiales del Ejército Argentino fueron suspendidos debido a al misterioso "faltante" de 26 mil balas de calibre 9 milímetros en el Batallón de Arsenales 603 "San Lorenzo", en Fray Luis Beltrán.
La denuncia por este hecho fue presentada a fines del año pasado por el propio Ejército ante el Juzgado Federal Nº3 de Rosario, cuyo titular es Carlos Vera Barros y las actuaciones fueron giradas al fiscal Mario Gambacorta.
Según trascendió, el Ejército alegó que se advirtió que faltaban de su depósito 26 mil balas después de hace un control de municiones acopiadas.
De acuerdo a fuentes citadas por el diario La Nación, el ministro de Defensa de la Nación, Agustín Rossi, ordenó una investigación administrativa del hecho a la par de la pesquisa judicial y decidió el traslado del arsenal de "munición de bajo calibre" a otra dependencia del Ejército, que aún no fue definida.
La presunta sustracción se produjo días antes de que se conociera el faltante del misil TOW 2, que fue denunciado ante el juez federal de La Plata Laureano Durán y esto, de acuerdo al matutino porteño, llamó la atención de los funcionarios de esa cartera.
Las 26.000 balas que faltan del Batallón 603 pueden ser utilizadas en cualquier pistola de calibre 9 mm. En la mayoría de los homicidios y hechos de inseguridad que se cometen cada día se usan armas de ese calibre.
Una caja de 50 unidades en una armería cuesta entre 450 y 500 pesos. Pero en el mercado negro estas municiones pueden venderse al doble de su precio, según explicó un especialista de una fuerza de seguridad.
Ese tipo de balas se producen en la Fábrica de Armas Fray Luis Beltrán, que depende de Fabricaciones Militares, y se encuentra a pocos metros de la sede del Batallón 603, que es conducido por el coronel Guillermo Bonnefous. Este militar fue ascendido el 27 de diciembre de 2012, a través del decreto 2597/12.