La titular de Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, sumó dos denuncias por haber amenazado con "entrar" a Tribunales y develar información sobre los jueces de la Corte Suprema, luego de una serie de fallos adversos contra el gobierno sobre la ley de medios. Bonafini ironizó sobre las denuncias en su contra y aseguró que eso demuestra que los jueces "son precionables".
A la denuncia que este anteya hizo de oficio el fiscal Diego Nicholson se le sumó la que realizó ayer el abogado Luis Vitale, luego de los dichos de la titular de Madres en un acto realizado la semana pasada en la puerta del Palacio de Tribunales, poco después de que la Corte confirmara la prórroga de la cautelar a favor del Grupo Clarín que impide la aplicación plena de la ley de medios.
En la denuncia de Vitale, que recayó en el juzgado a cargo de María Servini de Cubría, se acusó a Bonafini de la comisión de los delitos de "intimidación pública, asociación ilícita, instigación a cometer delitos, extorsión, atentado y resistencia a la autoridad".
"La gravedad de estos dichos (de Bonafini) se produce porque quien los vierte es una persona que apoya al gobierno y no formulando las debidas aclaraciones, la misma señora presidenta es quien con otras palabras en su Twitter refirió al Poder Judicial con un total desprecio por la división de poderes", detalló Vitale en la causa que quedó registrada bajo el número 170/13.
Además, el abogado pidió que se tomen "medidas cautelares preventivas" para evitar que este jueves, día de la tradicional marcha de las Madres, "se tome la sede del Palacio de Justicia y se puede ejercer presión, intimidación o amenaza sobre los funcionarios judiciales".
Por su parte, el fiscal Nicholson, cuya denuncia quedó a cargo del juez federal Sebastián Ramos, también solicitó la implementación de una custodia especial en el Palacio de Justicia, luego de cuestionar "el silencio que altos funcionarios han guardado" sobre lo dicho por Bonafini.
Bonafini "debe haberse sentido protegida y en suposición desafiante fortalecida", ya que "nadie del Poder Ejecutivo ha tenido la prudencia de llamar a la mesura, e incluso de exigirle un comportamiento totalmente opuesto", remarcó.
"No se necesita mayor inteligencia para darse cuenta que ha sido otra manera de presionar, sin escrúpulo alguno a los mencionados magistrados, pues no debiera descartarse que se dieran a conocer circunstancias de la exclusiva vida personal de los magistrados —falsas o no—, pero en todo caso sin interés para la comunidad", remató el fiscal.
Irónica. Al respecto, Bonafini ironizó con el pedido de Nicholson para que se implemente una custodia especial en el Palacio para los jueces de la Corte, y aseguró que de esa forma advierte que los magistrados "son presionables".
"En respuesta al señor fiscal general Diego Nicholson quiero decirle que concuerdo con él cuando dice que lo que las Madres hacemos son presiones, y concuerdo porque se da cuenta de que los jueces de la Corte son presionables", sostuvo Bonafini.
A través de un comunicado, la titular de Madres enfatizó que "las presiones" entre el CEO del Grupo Clarín, Héctor Magnetto, y las de su agrupación "son como una pulseada".
"Es saber quién tiene más fuerza: si Magnetto o el pueblo, porque eso es lo que las Madres hacemos: presionamos con nuestra acción. También estoy de acuerdo en que custodien con más policía la Corte Suprema por miedo al pañuelo. El pañuelo, a veces, tiene más fuerza que un fusil. Nosotras siempre hemos puesto el cuerpo y con él nos hemos defendido", concluyó.
La semana pasada, Bonafini realizó una manifestación frente a Tribunales en medio de la disputa entre el Gobierno y la Justicia por el caso Clarín y amenazó con "entrar" al Palacio para obligar a los jueces de la Corte a "ponerse las pelotas", mientras que al día siguiente prometió difundir datos desconocidos sobre los magistrados para que todos "sepan quién es" cada uno de ellos.
Por Luis Castro
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