La presidente Cristina Kirchner criticó ayer a "medios opositores" por el tratamiento que hicieron de su reciente cuadro médico y los acusó de no haber dado la trascendencia correspondiente a la reunión de la Celac en Cuba.
La presidente Cristina Kirchner criticó ayer a "medios opositores" por el tratamiento que hicieron de su reciente cuadro médico y los acusó de no haber dado la trascendencia correspondiente a la reunión de la Celac en Cuba.
Con una extensa cadena de 23 mensajes en Twitter publicada en la madrugada de ayer, Cristina también cuestionó los titulares de los diarios Clarín y La Nación sobre su reciente problema de salud por una inflamación en la zona de la cadera, por la que tuvo que acudir al Hospital Austral.
En tono irónico, relató su salida de la Casa Rosada el pasado jueves por la noche, donde numerosos fotógrafos la esperaban para registrar el momento en imágenes, y estimó que muy probablemente mantenían la esperanza de verla desplazándose con "muletas".
"Casi 21:30. Salgo de la Rosada. Fotógrafos y cámaras varias. Inclusive, uno en la entrada del helipuerto. Ah no ya sé... ¿Habrán mandado a los fotógrafos porque esperaban verme salir en muletas, por la bursitis del trocánter izquierdo diagnosticado?", se preguntó en el primer mensaje.
Luego explicó que la dolencia por la que fuera atendida en el Hospital Austral el día que volvió de Cuba no reviste gravedad ya que puede ser resuelta con tratamientos sin ninguna complejidad, y señaló que a pesar de la levedad de la afección los titulares de medios opositores intentarían magnificarla.
"Es una inflamación que se trata con kinesiología y un poco de hielo. No, seguro que no. Me juego por el título catástrofe", planteó, y criticó "la construcción de la mentira diaria, la contradicción patética y la catástrofe permanente".
La mandataria continuó diciendo a través de sus tuits que los medios incurren en "contradicciones permanentes", y sobre lo que se dijo de su extenso silencio durante diciembre y enero, cuestionó: "Que si habla, que si no habla, que cuando habla no la publican, etcétera".
Les reprochó también el tratamiento que dieron a sus vacaciones en El Calafate, mientras que no se consideró con el mismo enfoque los viajes de políticos oficialistas y opositores.
"Me fui el viernes 20/12 a mi casa y volví el lunes 6/1. Cuatro días hábiles fuera de Buenos Aires. El resto de los políticos propios y ajenos se los ve en playas todo el mes de enero, vacacionando. Ojo que no es crítica, a nadie", expresó.
A su vez, jugó con adivinar los titulares de los diarios opositores luego de esta nueva intervención en Twitter: "Me juego por este otro: «Duro ataque de CFK a la prensa» y como subtítulo «Furia y catarata verborrágica a través de su cuenta en Twitter»".
"Cuando hablo en la segunda cumbre de la Celac, junto a más de treinta jefes y jefas de Estado, tres reuniones bilaterales con jefes de Estado, México, Venezuela, Uruguay... Clarín y La Nación mutis por el foro", lamentó.
Cristina concluyó los mensajes dirigiéndose a organismos de prensa: "Si me equivoco, que la SIP (Sociedad Interamericana de Prensa) y Fopea (Foro de Periodismo Argentino) me perdonen".
Akishino, un príncipe en la Rosada. La presidenta Cristina Fernández recibió ayer en el salón Evita de la Casa Rosada al príncipe de Japón, Akishino, hijo del emperador nipón, quien está de visita en Buenos Aires por el 50 aniversario del acuerdo de inmigración firmado entre ambas naciones.