La Cámara de la Construcción de Rosario manifestó su preocupación por el incremento de los insumos luego de la escalada del dólar de los últimos días, tras lo cual los materiales esenciales para la actividad como el acero o el asfalto se encarecieron 30 por ciento y 18 por ciento respectivamente. También a los empresarios del sector los inquieta el encarecimiento del dinero, específicamente la financiación que las constructoras acostumbran utilizar como instrumento para adelantar cobros, la cual, producto del alza de tasas que dispuso el Banco Central, llegó a superar el 70 por ciento.
Ante este escenario, la entidad local le propondrá al gobierno santafesino una revisión del sistema de redeterminación de costos de la obra pública y el diseño de algún mecanismo de financiación que permita darle continuidad a la actividad.
Franco Gagliardo, presidente de la delegación rosarina de la CAC, destacó que "hubo subas que son difíciles de relacionar" ya que "algunos insumos subieron más de lo que subió el dólar", dijo. En ese sentido, mencionó el caso del hierro o el asfalto, pero también alertó por la posibilidad de que otros insumos "mañana puedan subir".
"Genera inconvenientes bastante serios cotizar una obra", dijo Gagliardo y explicó que "sobre todo en la obra pública, una vez cotizada, es difícil que haya coherencia con la suba de precios, especialmente por los índices de actualización que tiene el Estado".
El máximo referente de los constructores de la ciudad, además, agregó que cuando se corrige el costo "el aumento se da hoy y el reconocimiento a lo mejor está a los cuatro meses".
En tanto, Gagliardo explicó, en cambio, que con la obra privada —los desarrollos inmobiliarios y la construcción de viviendas particulares— el problema es otro. "Allí se pueden ir reflejando los costos en el producto, pero eso tiene un límite, que es el que impone la demanda, y lo estamos viendo con los créditos hipotecarios", detalló.
Al respecto aseguró que mucha gente, como los bancos les dan un monto fijo en pesos, no llegan a comprar, y no sólo porque aumentó el dólar, sino porque aumentó el costo del dinero", detalló.
El sombrío panorama no comenzó en mayo con la escalada del dólar, pero sí se acentúo a un nivel que compromete la actividad. "Lo sufrimos de forma permanente, es una especie de goteo", dijo.
El empresario reconoció que los costos de la actividad se dispararon. "Los saltos son muy grandes. El acero subió 30 por ciento en los últimos días y el asfalto subió 18 por ciento hace unos 15 días y no sabemos si no van a volver a subir. Son números muy grandes, ya que normalmente subían un 3 ó 4 por ciento", detalló.
En los últimos años la obra pública que mueve la actividad de la constructora es, fundamentalmente, la que licita el Estado provincial. Por eso es clave para la cámara discutir estos ajustes con las autoridades santafesinas, con quienes tienen una mesa permanente. "Les planteamos la situación a los ministros de Infraestructura, Obra Pública y Economía, Gonzalo Saglione, y vamos a tener una reunión", dijo. ╠
■□El presidente de la cámara de constructores dijo que la idea es "lograr agilizar" los mecanismos de readecuación y plantear algunos mecanismos de financiación, certezas de cobro. También consideraron clave la autorización legislativa para tomar deuda por u$s 500 millones de dólares para hacer obras.