En tiempos en que el coronavirus desafía los sistemas sanitarios del país y del mundo, los buenos números de la ciudad y la provincia en el combate de la pandemia agrandan el legado de Hermes Binner en este terreno.
Por Mariano D'Arrigo
En sus gestiones como intendente y gobernador Binner construyó dispositivos claves en el área de salud.
En tiempos en que el coronavirus desafía los sistemas sanitarios del país y del mundo, los buenos números de la ciudad y la provincia en el combate de la pandemia agrandan el legado de Hermes Binner en este terreno.
Al frente de la secretaría de Salud de Rosario, entre 1989 y 1993, y como intendente de la ciudad, entre 1995 y 2003, Binner fue el arquitecto principal de un sistema de salud basado en la presencia territorial y el vínculo con la comunidad.
El actual secretario de Salud del municipio, Leonardo Caruana, señaló a La Capital que Binner tomó las crisis sociales que debió enfrentar como una oportunidad para construir un sistema de salud basado en derechos. "Él decía que donde no había llegado el Estado había que poner un centro de salud", recordó.
Otra característica de Binner, aseguró Caruana, era su mirada de largo plazo. "Hermes pensaba más allá del proceso electoral, creía en armar equipos amplios a partir del diálogo y entendía que la participación de la sociedad en la salud era clave", aseguró.
Caruana conoció a Binner cuando el actual secretario era jefe del centro de salud Emaús, ubicado en el noroeste de la ciudad. "Recuerdo que en la inauguración dijo que necesitamos trabajadores con la salud y que se encuentren con los vecinos a discutir, por eso los centros de salud tienen lugares amplios para debatir todos los problemas del barrio", subrayó.
Uno de los sueños que Binner pudo concretar durante su gestión como intendente fue el Centro de Especialidades Médicas Ambulatorias (Cemar), inaugurado en 1999 y del que Caruana fue director. También durante su mandato se creó el Laboratorio de Especialidades Medicinales (LEM) y se proyectó el nuevo Hospital de Emergencias Clemente Alvarez (Heca), inaugurado en 2008.
Tras ser elegido gobernador en 2007, Binner implementó en la provincia el mismo modelo que había perfeccionado Rosario.
"Siguió siendo coherente a sus ideales —planteó Caruana—.Volvió a retomar la salud en la provincia, con la idea de que no había que competir entre dos sistemas públicos. Apostó a la construcción de un sistema público integral, con una mirada de estadista".
El ministro de salud durante la gobernación de Binner, Miguel Cappiello, aseguró que el objetivo del entonces titular de la Casa Gris era "tratar de garantizar el derecho a la salud de todos, que todos tengamos la misma posibilidad de acceder a una salud de calidad".
Y admitió: "Se hicieron las obras que faltaban pero no se terminaron todas, como el Hospital Regional Rosario Sur, el de Rafaela y el de Coronda, pero sí se avanzó con los centros de salud, que son parte de una estrategia de atención primaria. Hermes remarcaba que de una consulta en un centro de salud se pueda terminar en un trasplante".
La pandemia, un desafío
Lo cierto es que ahora la pandemia pone a prueba los sistemas sanitarios que construyó Binner. En este punto, Caruana y Cappiello destacaron la performance de la salud pública local. El secretario cuestionó "las políticas neoliberales que debilitan al Estado" y subrayó que "el derecho a la salud es el derecho a la vida".
En la misma línea, Cappiello afirmó: "A diferencia de lo que sucede en otros lugares, nosotros tenemos un sistema de salud que nos protege. En Rosario se fue a la casa de la gente y se les llevó medicamentos para dos meses, se los cuidó. Es un legado más que importante de lo que empezó Binner".
Ese legado también se refleja en números. Hoy la ciudad tiene 67 centros de salud y 12 hospitales públicos (entre municipales y provinciales) y uno de cada cuatro trabajadores municipales pertenece a la secretaría de Salud.
Además, mientras que en 1989 sólo el 8 por ciento del presupuesto municipal se destinaba a salud, hoy es el 24 por ciento. Por caso, en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires la cartera conducida por Fernán Quirós tiene sólo el 14 por ciento de los recursos.