Luego de algunos cortocircuitos, el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández, finalmente recibió ayer en la Casa Rosada a su sucesor electo, Marcos Peña, para iniciar el trabajo de transición y ambos coincidieron en que fue un encuentro "cordial y positivo".
"Por expresas instrucciones de la presidenta Cristina Kirchner he recibido hoy (por ayer), viernes feriado, a Marcos Peña. Buena charla y temas variados. Quedamos en volver a vernos para seguir conversando", se limitó a publicar Fernández en su cuenta en la red social Twitter.
El encuentro, del que no hubo fotografías, se produjo luego de varias idas y vueltas en torno a la modalidad del proceso de transición, ya que Fernández pretendía que se manejara de manera más reservada, mientras que Peña puso énfasis en el carácter público que debían tener estos encuentros y denunció incluso un intento de "transición clandestina u oculta".
Peña, uno de los principales asesores del jefe de Estado entrante, se había rehusado incluso inicialmente a participar de un encuentro con el funcionario saliente, al rechazar las condiciones que quería imponer el ex candidato a gobernador bonaerense.
Finalmente, el encuentro se produjo en el feriado de ayer, y sorpresivamente fue informado por Peña a las 7.59 a través de las redes sociales. A la salida de la Casa Rosada, luego de unos 45 minutos, el futuro ministro coordinador señaló que fue una audiencia "informal, muy cordial y positiva", y que charlaron "temas generales del funcionamiento de la Jefatura de Gabinete y el traspaso".
"Fue una muy cordial charla, muy buena para trabajar un poco los temas de la transición que vienen. Nos parece muy positivo que podamos ayudar a empezar a hacer una transición más relajada, más ordenada y fue un muy buen paso en ese sentido", sostuvo el dirigente del PRO en declaraciones a la prensa.
En ese sentido, el actual secretario general del Gobierno porteño, que se presentó con saco pero sin corbata, resaltó que "siempre sirve conversar", y subrayó que "en la Argentina que está arrancado el diálogo tiene que ser lo normal".
"Definimos seguir conversando distintos temas prácticos que hacen al traspaso de poder. Fue una primera charla, más cordial, más relajada para poder charlar temas más generales sobre el funcionamiento de la Jefatura de Gabinete. Son pasos positivos. En la Argentina que está arrancando el diálogo tiene que ser lo normal", indicó Peña.
Respecto de la naturaleza de la reunión, el futuro funcionario nacional indicó que fue "coordinada" el pasado jueves entre ambos y que la comunicó vía Twitter para que no fuera "nada oculto ni secreto".
"Con Aníbal Fernández compartimos la responsabilidad que nos toca en lo que implica una transición, un traspaso de mando simbólicamente para una democracia que tiene que mostrar mucha civilización, mucha cordialidad y en eso creo que vamos a poder ir dando los pasos. Por ahí no estemos de acuerdo en todo, pero trataremos de dar los pasos necesarios para que las cosas no se interrumpan el 10 de diciembre", apuntó.
El futuro jefe de Gabinete también reveló que "hay charlas informales en los distintos ministerios" entre las actuales autoridades, que responden al Frente para la Victoria, y sus sucesores de Cambiemos, más allá del tenso encuentro entre la presidenta Cristina Kirchner y Macri en la quinta de Olivos, en el que no hablaron más que de lo estrictamente protocolar.
La reunión entre Fernández y Peña estaba prevista para el miércoles pasado en Casa de Gobierno, un día después de que Fernández de Kirchner recibiera durante 20 minutos en la residencia presidencial a Macri, pero fue suspendida luego de que el presidente electo dijera que el encuentro en Olivos "no había valido la pena".
En sus declaraciones de ayer, Peña buscó bajar el tono de esas afirmaciones y explicó que esos dichos de Macri respondieron a una "pregunta específica" de la prensa. Al respecto, Fernández había explicado que la presidenta "lo único que pidió fue discreción porque los temas políticos no se pueden debatir por los medios".
Barañao: "Macri valoró lo que se ha logrado"
El ministro de Ciencia y Tecnología, Lino Barañao, afirmó que su ratificación en el cargo más allá del 10 de diciembre "implica un compromiso de apoyo" al área por parte del presidente electo, Mauricio Macri, al tiempo confirmó que consultó el ofrecimiento con la mandataria, Cristina Kirchner.
"Mi designación implica un compromiso de apoyo a la ciencia por parte del presidente electo (Mauricio Macri). Marca un cambio en la actitud política y fue uno de los motivos que me llevó a aceptar este ofrecimiento, que fue intempestivo, yo ya había desalojado mi oficina", sostuvo el funcionario nacional.
El titular de la cartera científica destacó que la decisión del líder del PRO de ratificarlo en el cargo se debió al "éxito de una gestión que fue posible por un apoyo continuo durante estos doce años", en alusión a los tres mandatos consecutivos del Frente para la Victoria.
"Se ha valorado lo logrado, que fue por la continuidad. Creo que deben haber considerado que hacer cambios en este momentos podía ser lesivo a la continuidad de este proceso y podría comprometer algunos de los logros", manifestó Barañao.
Ofrecimiento y consulta. Asimismo, el ministro relató que el ofrecimiento para permanecer en el cargo se lo hizo el futuro jefe de Gabinete, Marcos Peña, a quien le indicó que "obviamente" lo iba a consultar con la jefa de Estado. "(Ella) Sin dudar dijo que tenía que aceptar, con estos compromisos que explicitó de que se mantuviera la planta de personal, el apoyo presupuestario", indicó.
Y agregó: "Creo que si Cristina me decía que no, hubiera declinado. Por una cuestión de lealtad personal. Lo que se hizo en Ciencia fue en gran medida gracias a ella, me eligió como ministro, me apoyó durante toda esta gestión. Lo que se hizo fue algo conjunto. Ella tenía todo el derecho a opinar". Respecto de su relación con Macri, Barañao relató que el pasado jueves habló "por primera vez" con él y destacó que fue un diálogo "muy cordial".
"Me dio la bienvenida al equipo de trabajo, dijo que esperaba que me integrara y que hubiera resultados y que para ello iba a tener todo el apoyo necesario. Le agradecí la confianza y me comprometí a mantener el rumbo", concluyó.