La gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, le reclamó ayer a Vialidad Nacional que le rescinda las obras a Lázaro Báez, a la vez que reiteró el pedido a la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, para que envíe efectivos de Gendarmería que garanticen el tránsito en las rutas.
“No estoy de acuerdo con la represión pero todo tiene un límite”, señaló la mandataria respecto al pedido que ya había sido planteado días atrás por el fiscal federal ad hoc Fabricio Sachi, sin novedades hasta el momento.
La veintena de piquetes en distintas localidades santacruceñas provocaban desabastecimiento e impacto económico en las arcas provinciales, además de traer consecuencias sociales y de salud, en el marco de las protestas de trabajadores de la construcción por el pago de sueldos adeudados o liquidaciones finales.
Tras lanzar críticas contra Báez, empresario que fuera cercano a la familia Kirchner, la gobernadora remitió un pedido a Vialidad Nacional para que rescinda las obras adjudicadas al empresario, hoy paralizadas, y que las reactive con otras compañías.
En medio de las protestas, la mandataria provincial afirmó además que no entendía el acampe frente a la Casa de Gobierno, donde asumió en diciembre pasado, al considerar que los trabajadores “deberían ir a reclamarle a Báez”.
En toda Santa Cruz solo había este viernes fluidez en el abastecimiento de combustible en la ciudad de Caleta Olivia, mientras que en la capital santacruceña queda para unas pocas horas más, según se estima.
También se comenzó a resentir la provisión de alimentos frescos que son transportados en camiones desde otras provincias, ya que en Caleta Olivia el corte para el transporte y la actividad petrolera era total.
La ruta nacional 3 es el principal vínculo del norte de la provincia con el sur y al estar cortada, los camiones que llevan alimentos, medicamentos y combustibles no pueden llegar a sus lugares de destino.
Cristian Salazar, secretario general de la Uocra Zona Norte de Santa Cruz, llegó en la madrugada del viernes a Río Gallegos acompañado por otros dirigentes gremiales del sector para pedir una reunión con altos funcionarios del gobierno de Alicia Kirchner, aunque no encontró respuesta.
Los representantes gremiales llegaron desde la ciudad de Caleta Olivia y alrededores pero, al no conseguir una entrevista con funcionarios, decidieron realizar un acampe frente a la Casa de Gobierno provincial al menos hasta ser recibidos para plantear sus reclamos.