Uno de los jóvenes asesinados recibió diez disparos en la espalda y uno en la cabeza

El fiscal Ademar Bianchini, que interviene en la causa por el homicidio de los dos chicos que fueron acribillados esta mañana en Circunvalación y Garibaldi, se sorprendió por la "crudeza" con que fueron atacados, puesto que uno de ellos recibió diez disparos de arma de fuego en la espalda y uno en la cabeza, mientras que el otro fue muerto de un tiro en la cabeza. 

 

Para el fiscal, quien afirmó que están evaluando distintos elementos, "llama la atención la crudeza del crimer", por lo menos en lo que respecta a "uno de ellos" por lo que, según su parecer, "diera la sensación de haber sido perseguido por una o más personas, pero se desconoce en que circunstancias". 

 

La argumentación del fiscal se entiende debido a que "en la primera observación", uno de ellos presentaba "diez disparos de arma de fuego en la espalda y un disparo en la cabeza", mientras que la otra tenía "un disparo en la cabeza". 

 

Y si bien en el lugar fueron recogidas varias vainas, Bianchini señaló que "no podemos afirmar si corresponden a una o varias armas, porque todavía no han sido peritadas". 

 

Por lo pronto, y como es una zona más alejada, el lugar carece de cámaras de videovigilancia. "Hasta ahora no hemos detectado cámaras en la zona. estamos haciendo un relevamiento detallado para ver si hay cámaras particulares o de alguna empresa, no que tome el homicidio, pero al menos para que nos acerque a ver si fueron perseguidos por algunas cuadras, pero hasta el momento no hay testigos ni cámaras que hayan sido localizadas", argumentó el fiscal.