La brusca frenada de un auto y una andanada de disparos fue lo único que
escucharon los vecinos de La Cumbre al 1800, en el extremo norte de la ciudad, durante la madrugada
de ayer. Enseguida dieron aviso a la policía y cuando los primeros efectivos llegaron al lugar sólo
hallaron a un muchacho gravemente herido tirado junto a una cuneta. Cuando lo trasladaban al
Hospital de Emergencias en una ambulancia, el hombre falleció. Poco después, al mismo centro
asistencial llegaron otros dos jóvenes heridos de bala y procedentes del Hospital Alberdi, donde
habían ingresado por sus propios medios y heridos de bala. Los dos dijeron que habían sido atacados
en otro lugar aunque los investigadores lograron descifrar luego que mentían.
El hecho ocurrió poco después de la 1 de la mañana en La Cumbre al 1800, detrás
del galpón de una empresa de colectivos interurbanos, casi donde nace la autopista a Santa Fe. A
pesar de que las primeras versiones indicaban que la balacera había sido producto de un
enfrentamiento entre bandas opuestas y que los alcanzados por los disparos eran rivales entre sí,
con el correr de las horas la hipótesis de los investigadores cambió. "Para nosotros estos tres
muchachos estaban juntos y les dispararon a mansalva para ajustar cuentas", confió un vocero de la
pesquisa.
Una frenada. Lo cierto es que el testimonio de los vecinos, que aseguraron haber
escuchado una frenada, los disparos y después la huída del vehículo para escapar, llevaron a los
efectivos a pensar que desde ese auto partieron los disparos.
"Esto es muy difícil de investigar porque ante estas situaciones todos hacen
silencio y dicen no haber visto ni escuchado nada", dijo la fuente policial. Y agregó: "Vamos a
esperar a que pasen las horas y los días a ver si alguien se quiebra y nos aporta datos para
esclarecer el hecho que se presenta muy confuso".
Como consecuencia de la balacera, resultaron heridos Sebastián Fernández, de 27
años; Ezequiel Contreras, de 22; y Martín Belloso, de 18. El primero de ellos murió cuando era
llevado al Heca y, de acuerdo a la policía, junto a él se hallaron vainas de una pistola 9
milímetros y una réplica de revólver calibre 38.
Mentiras. En cuanto a los otros dos heridos, llegaron por sus medios al Hospital
Alberdi. Allí dijeron que habían sido atacados en Los Cocos y Ricardo Núñez, aunque después no
pudieron sostener su mentira y se supo que provenían del mismo sitio en el que fue encontrado
malherido Fernández.
Acerca del joven muerto, voceros policiales dijeron que tenía 10 antecedentes
penales y dos condenas: una de 2001 por tenencia de arma y otra de 2006 por robo calificado.
Respecto de los heridos, también tienen antecedentes. Contreras tenía un disparo
en un brazo y Belloso uno en el tórax y otro en la pelvis. Ambos seguían anoche en el Heca fuera de
peligro, dijeron las fuentes que esperan poder sacarle algunas palabras cuando se recuperen. La
investigación quedó a cargo de la comisaría 34ª y la Brigada de Homicidios de la Unidad Regional
II.