Rosario tuvo una Navidad sangrienta con tres homicidios ocurridos en distintos puntos de la ciudad. En uno de esos casos, la víctima fue un joven de unos 20 años que murió al recibir un disparo de arma de fuego en el cráneo.
Rosario tuvo una Navidad sangrienta con tres homicidios ocurridos en distintos puntos de la ciudad. En uno de esos casos, la víctima fue un joven de unos 20 años que murió al recibir un disparo de arma de fuego en el cráneo.
Fuentes policiales consultadas por La Capital indicaron que el primero de los hechos se produjo alrededor de las 2.30. En realidad a esa hora ingresó al Hospital Roque Sáenz Peña con una herida de bala en el tórax Jonathan Balmacena, de 28 años.
Según los voceros, Balmacena fue trasladado por allegados desde el pasaje 512 al 6300 (España al 6300), pero no dieron ningún detalle de lo ocurrido. De acuerdo a las fuentes, el hombre fue llevado, ya herido, hasta la puerta de la casa de sus padres en un automóvil Ford Fiesta de color blanco.
Quienes lo trasladaron hasta allí, luego de bajarlo del auto y dejarlo en el piso, huyeron del lugar, dejando el automóvil abandonado. Los familiares cargaron al herido en otro vehículo y lo llevaron hasta el Roque Sáenz Peña, donde falleció. Luego se comprobó que el Ford Fiesta era robado.
El segundo asesinato se produjo alrededor de las 6 en Biedma 196 bis, también en la zona sur de Rosario. En principio, este caso se encuadraría en una pelea entre vecinos. De acuerdo a las primeras informaciones, Héctor Benjamín Arévalo, de 61 años, habría mantenido una discusión con otro hombre de la zona, quien empuñó un arma de fuego y disparó contra Arévalo.
La víctima recibió un impacto en el tórax y falleció camino al hospital. El autor del homicidio está prófugo.
El tercer caso se produjo en la zona norte, en jurisdicción de la seccional 10ª. Poco después de las 7 en Lambaré y Renán ocurrió otro violento altercado en el que perdió la vida Lucas Joel Fernández, de unos 20 años, quien recibió un disparo de arma de fuego el cráneo.
Voceros policiales indicaron que Fernández mantuvo una pelea con un muchacho de 22 años que vive en la misma zona. Tras un cruce de palabras, esta persona esgrimió un arma y disparó sobre el menor, quien murió en el acto.
El último de los hechos se registró en Solís y Viamonte donde un hombre, Marcelo Parodi, de 44 años fue asesinado a puñaladas por otro en medio de una pelea. Según trascendió, víctima y victimario eran pareja y por causas que no están confirmadas esta madrugada se produjo una pelea que terminó con Parodi con múltiples heridas cortantes efectuadas con el cuello de una botella.
Según informó la policía, la víctima fue trasladada por un móvil del Sies hasta el Hospital de Emergencia, donde poco después falleció. Al tomar conocimiento de lo ocurrido, la policía de la seccional 14 se presentó en el domiclio donde había ocurrido todo y arrestó a Marcelo R., de 40 años, acusado de homicidio.
Las investigaciones para los cuatro homicidios quedaron a cargo del fiscal Miguel Moreno de la Unidad Especial de Homicidios Dolosos.
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