Un joven de 22 años fue imputado de un doble intento de homicidio en el marco de un asalto que, junto con tres cómplices, cometió la noche del pasado 10 de junio en barrio Ludueña Sur. Apodado “Lobo”, Andrés Ezequiel F. quedó en prisión preventiva por el plazo de ley de hasta dos años imputado de una tentativa de homicidio críminis causa, que es cuando se intenta matar -o se mata- con la intención de asegurar la impunidad para otro delito. En este marco, fuentes judiciales señalaron que uno de los dos jóvenes baleados por Lobo y sus acompañantes -hasta el momento no identificados- continuaba esta noche internado en grave estado por las heridas sufridas.
Según lo que se pudo reconstruir en la investigación a cargo del fiscal de Homicidios Alejandro Ferlazzo, que fue ventilado en la audiencia imputativa realizada este martes, el violento episodio ocurrió la noche del pasado jueves 10 de este mes en Felipe Moré y San Lorenzo. Sentados sobre un tronco de esa esquina, alrededor de las 21, se encontraban Alexis Maximiliano C. y Ezequiel Amancio V. junto con una niña tomando una gaseosa y mirando sus teléfonos cuando se les acercaron cuatro hombres armados, dos caminando por la vía y otros dos por la calle.
Dos de los recién llegados se quedaron a unos metros y los otros se acercaron a las víctimas. “Quéndense quietos, no se muevan”, dijo uno de ellos, mientras el otro les exigía: “Dénme los celulares”. En ese momento la niña se quiso ir de la escena y fue entonces que Lobo le puso un arma de fuego grande de color gris en la cabeza mientras su cómplice encañonaba, con un arma negra, a los otros dos. La nena le entregó entonces el celular Samsung J7 que tenía en sus manos, perteneciente a Ezequiel, y Alexis entregó su Samsung S20.
Al entregarlos los teléfonos los jóvenes les pidieron a los asaltantes que dejaran ir a la chica, que entonces pudo irse corriendo. En ese momento los ladrones montaron sus armas y comenzaron a disparar contra Alexis y Ezequiel. “Fueron muchos tiros, más de 15”, dijo un testigo sobre las detonaciones que escuchó. En la escena del hecho se levantaron ocho vainas servidas calibre 9 milímetros.
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Ezequiel V., de 22 años, quedó tendido con un balazo en el antebrazo izquierdo y otro en la ingle derecha; Alexis C., de 24, sufrió múltiples heridas de armas de fuego, una de ellas en la zona inguinal izquierda con afectación de la arteria femoral. Ambos fueron llevados por familiares y vecinos al Hospital Centenario, donde según se indicó en la audiencia Alexis continuaba internado en terapia intensiva en grave estado con pronóstico reservado. En tanto, Ezequiel ya obtuvo el alta médica.
Barbijo bajo
Un testigo reconoció a Lobo entre los agresores porque tenía el barbijo mal colocado y se le veía todo el rostro, y además aportó una descripción sobre su fisonomía y cómo estaba vestido al momento del hecho. Sin embargo no pudo distinguir quiénes eran los otros tres. En ese marco, también se indicó que los cuatro portaban armas de fuego.
La Agencia de Investigación de Criminal (AIC) comenzó entonces a buscar a Lobo y el sábado Ferlazzo dispuso que se realizaran allanamientos en un par de viviendas. Finalmente Andrés Ezequiel F. fue detenido en una casa de Teniente Agnetta al 100 bis donde se incautaron dos teléfonos celulares y dos tablets.
“Luego de haber sustraído efectivamente los celulares de V. y de C. usted y su compañero efectuaron numerosos disparos contra las víctimas con la intención de matarlos y procurar así su impunidad”, acusó el fiscal a F. este martes, cuando le imputó dos hechos de tentativa de homicidio críminis causa, robo calificado por el uso de arma de fuego así como la portación del arma con la cual participó del suceso.
El fiscal pidió que el acusado quede en prisión preventiva por el plazo de ley de hasta dos años. La defensa rechazó la imputación y propuso morigerar la medida cautelar con salidas alternativas o, en todo caso, que fuera dictada por un plazo de 45 días. Sin embargo el juez de primera instancia Román Lanzón hizo lugar al pedido de Ferlazzo, teniendo en cuenta que el acusado se encontraba cumpliendo una condena a tres años de prisión condicional con reglas de conducta por lesiones leves dolosas calificadas por el vínculo y amenazas coactivas calificadas por arma blanca que vence en abril de 2023.