Los tres hermanos acusados por una feroz balacera el domingo a la madrugada en barrio Las Flores, donde resultaron heridas seis personas, quedaron imputados de tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego en concurso real con portación ilegítima de arma de fuego de guerra, en carácter de coautores, y les dieron 60 días de prisión preventiva. En tanto, la defensa cuestionó el procedimiento policial de la detención. su parte, el fiscal a cargo del hecho dijo que hasta el momento le resulta imposible determinar si las dos cajas con balas calibre 9 milímetros secuestradas en el hecho pertenecen a las denunciadas como faltantes de la Fábrica Militare de Fray Luis Beltrán, ya que el juzgado federal a cargo de esa pesquisa aún no cuenta con el inventario correspondiente.
Federico, de 27 años; Juan, de 33; y Héctor, de 41 años, son los hermanos detenidos el domingo luego de una furiosa gresca entre dos familias ocurrida en Pasaje Peatonal 2100 (Clavel al 7000), en barrio Las Flores, donde uno de los bandos se molestó con el otro por los ruidos tras un cumpleaños de 15.
Según la hipótesis del fiscal de la Unidad de Homicidios, Adrián Spelta, todo se desencadenó cuando algunas personas que participaron del festejo trasladaban por el pasaje (donde se emplazan las viviendas de las dos familiares) objetos utilizados en la fiesta, movimiento que causó malestar en otros vecinos.
Cerca de las 5 de la mañana y ofuscado por ese trajinar, un hombre comenzó a disparar desde su casa. Luego, con otros tres integrantes de la familia hicieron numerosos disparos con armas calibre 9 milímetros desde la terraza.
Como consecuencia de la balacera, donde no se descarta un enfrentamiento según la posición de la defensa de los acusados, hubo seis personas heridas, aunque ninguno con riesgo de muerte.
Posiciones. Tras un procedimiento policial la misma mañana del domingo, en medio de resistencia y disparos de postas de goma, los tres hermanos fueron detenidos y acusados. Además, en el procedimiento se secuestró una pistola calibre 9 milímetros y dos cajas de balas que están bajo pericias (ver aparte).
Ayer, en la audiencia imputativa que presidió el juez Hernán Postma, Spelta formuló la acusación contra los hermanos como coautores de tentativa de homicidio agravado por el uso de arma de fuego en concurso real con portación ilegítima de arma de fuego de guerra. Y solicitó la prisión preventiva sin plazos en virtud a la sindicación de las víctimas, los elementos secuestrados, el pronóstico de pena en expectativa, la magnitud del daño producido y el comportamiento que tuvieron al quedar detenidos.
Mientras que los acusados se abstuvieron de declarar, el defensor público Diego Villar se opuso al encuadre legal e incluso cuestionó la teoría del hecho planteada por Spelta. Cuestionó el acta de procedimiento realizada por la policía y las entrevistas tomadas en fiscalía a las supuestas víctimas.
Villar rechazó la pretensión cautelar dando cuenta de un enfrentamiento en el que el único valor de cargo es el de las presuntas víctimas, y la existencia de otras armas que las que se secuestraron en poder de sus clientes —que no fueron halladas—, no pudiendo la Fiscalía probar quiénes las usaron.
En esa sintonía destacó las contradicciones en los testimonios y la inexistencia de dolo homicida. Evaluó que a lo sumo, a los tres hermanos se les puede achacar el abuso de armas. En caso de fallo adverso, solicitó la libertad con restricciones por un mes, y la prohibición de acercamiento entre ofensores y ofendidos.
El juez Postma se opuso al planteo de ilegalidad de la detención que hizo la defensa, acogió la imputación fiscal y ordenó la prisión preventiva por 60 días que por cercanía familiar cumplirán en la comisaría 24ª de Granadero Baigorria.
Peritar las balas
El fiscal a cargo de investigar la balacera en Las Flores se dijo ayer que “hasta el momento le resulta imposible determinar si las dos cajas con balas calibre 9 milímetros secuestradas en la casa de los supuestos agresores pertenecen al lote de 26 mil municiones denunciados como faltantes en enero pasado en el Batallón 603 de Fray Luis Beltrán”. Es que, según supo este diario, el juzgado federal a cargo de esa pesquisa aún no cuenta con el inventario de las balas extraídas en la repartición militar, lo cual impide cotejarlas con el secuestro del domingo en la zona sur de Rosario.