Santa Fe.— Los fiscales del juicio que se le sigue a José Luis El Colorado
Baroni por la vejación y crimen de la docente Alejandra Isabel Cugno, ocurrido en julio de 2009,
pidieron ayer la pena de prisión perpetua para el acusado. En tanto que los defensores, sin rebatir
los postulados acusatorios, reiteraron el pedido de nulidad de todo lo actuado al entender que se
vulneraron los derechos y garantías de su cliente además de denunciar algunas fallas procesarles
(ver aparte). Fue durante la audiencia de ayer, en la que se pronunciaron los alegatos que el
imputado escuchó con la cabeza gacha y sus manos cruzadas sobre el regazo, y que dará paso a la
lectura de la sentencia el próximo martes.
La penúltima jornada del juicio transcurrió ante una platea colmada. En el
inició de la audiencia, el defensor de Baroni, Claudio Villasboas, solicitó a las maestras de la
escuela 268 "Gobernador Molinas" de Cañada Rosquín, en la que trabajaba Alejandra Cugno, que
bajaran las fotos de la docente asesinada porque intimidaban al acusado. Aunque se mostraron
indignadas, las compañeras de Cugno accedieron al pedido para no entorpecer el transcurso de la
audiencia. Y entonces, el tribunal integrado por María Amalia Mascheroni, Dardo Rosciani y Norberto
Nisnevich, le dio la palabra a los fiscales.
Cúmulo de delitos. A lo largo 45 minutos, Graciela Parma y Juan Pablo López
Rosas desarrollaron su posición para sustentar el pedido de prisión perpetua por los delitos en
concurso real de rapto, abuso sexual con acceso carnal en grado de tentativa, homicidio doblemente
agravado por alevosía y criminis causa (para ocultar la comisión de delitos anteriores), robo y
estelionato. Y destacaron que la hipótesis que planteó Baroni en su descargo no es verosímil debido
a que "el testigo estrella nunca existió y no hay indicios de su intervención", en alusión a Daniel
González, el revendedor de autos de San Francisco al que el acusado imputó como autor del homicidio
de Cugno.
Después recontruyeron el raíd delictivo de Baroni desde el mediodía del 6 de
julio de 2009, cuando salió de su casa en busca de quien sería su víctima. Lo hicieron enlazando
con precisión los testimonios y pruebas incorporadas durante las jornadas previas con el relato del
mismo imputado. Entonces aseguraron que El Colorado "planificó plenamente lo que hizo teniendo como
objetivo tener relaciones sexuales y después matar a la maestra". Y aseguraron que la negativa a
ser abusada fue lo que originó el ataque que mató a Cugno.
Según la fiscal, Baroni le pidió a la docente que lo lleve a un campo donde le
iban a ofrecer un trabajo pero en el camino le propuso mantener relaciones sexuales. Cugno se negó
y se desató la violencia: la amenazó con un cuchillo, la introdujo en el baúl del auto y la llevó a
la casa de campo de Landeta donde la desnudó y la golpeó con un objeto (se presume que ladrillos o
restos de mampostería) para quebrar su resistencia. Finalmente sobrevino la muerte y la arrojó sin
vida al pozo donde la encontraron.
Según la autopsia, el cuerpo de la docente recibió 15 heridas en vida y 7 tras
su fallecimiento. Además, se determinó que Baroni derribó el brocal del pozo para tapar el cuerpo.
El médico de policía que lo examinó poco después de la detención concluyó que tenía escoriaciones
en el antebrazo derecho y en los nudillos de las manos, compatibles con lesiones sufridas por
golpear a otra persona.
Sin asidero. "No cuenta con asidero la hipótesis de Baroni" de imputar a Daniel
González, señaló Parma, y dijo que "ese hombre nunca apareció y resulta sospechoso que durante un
año el abogado defensor no haya buscado al supuesto asesino para deslindar responsabilidades de su
defendido". "Está absolutamente probada la responsabilidad de Baroni" dijo la fiscal y destacó que
el "trabajo ejemplar" realizado por la policía del departamento San Martín, el juzgado de
instrucción en turno y su par de San Jorge "otorgaron el sustento fáctico para el debate
posterior".
La fiscal también cuestionó que Baroni "mansilló durante el juicio el honor de
la víctima, implicó a personas ajenas al hecho y enredó al propio novio de Cugno con una relación
inexistente que se desbarató después de los testimonios". Parma selló su alocución con un mensaje
dirigido al Tribunal: "Desde mi condición de mujer, madre, hija y esposa, pido que no haya nunca
más mujeres abusadas y nunca más se produzcan muertes por la violencia ejercida por un hombre".