Silvina Salinas
Un joven de 23 años fue asesinado ayer a la mañana a metros de su casa en el límite entre los barrios Saladillo y Mangrullo, en el extremo sudeste de la ciudad. Según la información preliminar, fue identificado como Miqueas Hugo Brunes y fue baleado por al menos una persona que bajó de un auto y que al parecer lo estaba buscando.
El hecho es investigado por el fiscal de Homicidios Ademar Bianchini que encomendó a personal de la Agencia de Inteligencia Criminal (AIC, ex PDI) las primeras medidas para iniciar la pesquisa como levantamiento de rastros, pericias y toma de testimonios. En principio, en la zona se recogieron varias vainas servidas calibre 9 milímetros.
Caminando
Fuentes judiciales y policiales confirmaron que el hecho se desencadenó ayer alrededor de las 9.30 en avenida del Rosario al 800 bis, a menos de dos cuadras de donde esta calle se transforma en puente para cruzar el arroyo Saladillo. Por allí iba caminando Miqueas —al parecer rumbo a su casa— cuando fue sorprendido por los ocupantes del un auto viejo que subía por la colectora.
En ese punto había dos versiones disímiles sobre el crimen del muchacho. Una indicaba que los disparos fueron efectuados desde el auto en movimiento mientras que la otra indica que los agresores detuvieron el vehículo y al menos bajó uno de los ejecutores.
Lo cierto es que Miqueas recibió tres o cuatro impactos de arma de fuego calibre 9 milímetros y aunque al parecer alcanzó a incorporarse y desplazarse unos metros, finalmente murió en el lugar luego de una breve agonía.
Taunus
Cuando llegaron los primeros uniformados a la escena del crimen encontraron a Miqueas tendido en la calle sin vida, según constataron médicos del Sies.
En el vecindario no había mucha información sobre lo ocurrido, si bien algunos dijeron que conocían a la víctima. Ayer circulaba una versión policial basada en los primeros testimonios recabados en la zona. Según estos testigos el joven habría sido sorprendido por dos hombres que circulaban a bordo de un viejo Ford Taunus blanco.
Al respecto, momentos después personal del Comando Radioeléctrico encontró en Moliere al 500 bis un Ford Taunus cupé color blanco que estaba sin ocupantes. No se descartaba que se tratara del vehículo en el que iban los agresores.
Sin embargo, lo referido al auto no fue confirmado por la Fiscalía Regional, que indicó que se reservan las características del vehículo para preservar datos sobre la investigación.
Asimismo, los voceros judiciales señalaron que había medidas para determinar la motivación del ataque e identificar a los agresores, pero al cierre de esta edición no había sospechosos individualizados. En ese sentido, ayer se mencionaba que la víctima pudo haber tenido "viejas broncas" que pudieron haber tenido que ver con el crimen.