Walter Fabián Cichero fue condenado a 19 años de prisión por haber asesinado junto a un cómplice a Juan Ramón Aguirre la mañana del 10 de junio de 2016 en Larrea al 500, detrás del complejo de cines Village, en el barrio Ludueña. Por unanimidad, el tribunal integrado por Patricia Billotta, Paula Alvarez e Isabel Más Varela encontró a Cichero como culpable de homicidio en ocasión de robo en calidad de coautor en concurso real con tentativa de hurto. Las magistradas, en tanto, lo absolvieron por la portación ilegitima de un arma de fuego de uso civil. El fiscal Luis Schippa Pietra había requerido en su alegato de apertura 30 años de pena. Seis meses atrás, Nicolás Leonardo "Huevada" Gómez, cómplice de Cichero en ese crimen, acordó en un proceso abreviado una condena a 12 años de prisión.
Como era costumbre, el viernes 10 de junio de 2016 Juan Ramón Aguirre se levantó de madrugada para acompañar a su esposa Norma a tomar el colectivo. El hombre, de 46 y reconocido como "Correntino", tomó un pequeño machete que colocó en la manga de su campera por si acaso y salió junto a su compañera sin saber que unos minutos más tarde su vida se haría añicos.
Poco antes de las 5.45 dos muchachos intentaron robar un camión repartidor de lácteos estacionado frente a una panadería de San Lorenzo al 5300. El repartidor y el dueño del negocio los sorprendieron hurgando en la cabina y desistieron del robo. Al alejarse de allí, y correr unos 200 metros, se toparon con Aguirre y su esposa en Larrea 500.
Según la acusación fiscal, los maleantes apuntaron a Aguirre con un revólver y le exigieron el celular. El "Correntino" resistió el robo y uno de los maleantes, que según la acusación era Cichero, efectuó dos disparos que no salieron. Después gatilló otra vez y el balazo dio de pleno en el pecho de Aguirre sin darle tiempo a nada.
"Juan llevaba un pequeño machete escondido en el antebrazo, dentro de la campera. Pero en ningún momento vi que lo sacara. Lo que pasó es que cuando los ladrones ya se iban, él los corrió. Yo le decía: «Juan, dejalos que ya se van». Fueron seis o siete pasos. Entonces uno de los choros se dio vuelta y gatilló tres veces. Las dos primeras balas no salieron. Pero el tercer disparo le pegó en el pecho. Después no me habló más", explicó Norma aquella mañana antes de romper en llanto. Cinco días después del asesinato, Cichero fue detenido cuando ingresó herido de bala al Heca.
Confío en Dios
El 9 de octubre último Cichero, de 28 años, comenzó a ser juzgado. En su alegato de apertura el fiscal Schiappa Pietra le imputó una serie de delitos como presunto protagonista de la secuencia que culminó con el crimen: tentativa de robo calificado al camión repartidor, el homicidio de Aguirre en ocasión de robo agravado por el uso de arma de fuego y la portación de un arma de uso civil. Por todo ello el fiscal pidió 30 años de prisión.
En junio Cichero había rechazado un proceso abreviado que contemplaba una pena de 15 años de prisión en los que se unificaban esos delitos con una condena previa a tres años que estaba pendiente de cumplimiento. Entonces dijo que no firmaba porque confiaba en que "el Señor Dios" estaba de su lado.
Lo curioso del caso fue que por esos días Cichero estuvo muy cerca de recuperar la libertad. Ya llevaba más de tres años en prisión preventiva y, extinguido el plazo legal para mantener esa medida cautelar, los jueces Hebe Marcogliese, Silvia Castelli y Carlos Curto ordenaron que quedara en libertad tras pagar una caución de 150 mil pesos al tiempo que ordenaron que se realizara la audiencia preliminar. Sin embargo, ese fallo fue revocado por la Cámara Penal y Cichero siguió tras las rejas.
Abreviado
Previamente, en abril "Huevada" Gómez había admitido su participación en el hecho mediante un juicio abreviado que lo condenó a 12 años de cárcel como coautor del robo al repartidor y partícipe secundario del crimen del "Correntino", pena que cumple en prisión domiciliaria a causa de una grave enfermedad contraída en la cárcel y que lo confinó a una silla de ruedas.
Ayer el tribunal convocó a las partes a una audiencia y esperó a que Norma y una de sus hijas ingresaran a la sala para escuchar el veredicto. Por unanimidad, las juezas condenaron a Cichero a 19 años por homicidio en ocasión de robo en calidad de coautor en concurso real con tentativa de hurto y lo absolvieron por el delito de portación ilegítima de arma de fuego de uso civil.