El ministro de Seguridad de Santa Fe, Raúl Lamberto, no descartó que los autores de las amenazas de bombas contra entidades bancarias de Rosario provengan de personas vinculadas a la fuerza policial. Lo dijo ayer al registrarse el sexto episodio de esta clase en 45 días, luego de que efectivos de la Brigada de Neutralización de Explosivos acudieran a un cajero automático en Paraguay al 800, perteneciente al Nuevo Banco de Santa Fe. En la puerta del cajero habían dejado un paquete sospechoso de contener un explosivo, lo que no se verificó.
"Nosotros no podemos descartar en una investigación que los autores puedan ser o no personas vinculadas con la fuerza", señaló Lamberto. Para el ministro, por los indicios reunidos tras la sucesión de amenazas de bomba, los responsables de estos movimientos son "gente que conoce el oficio".
"En esto quiero ser prudente, porque que una fuerza que tiene por misión nada menos que ser una brigada contra explosivos sea parte de colocar explosivos sería muy negativo para la sociedad", comentó Lamberto ayer, en el Registro Nacional de Armas de Fuego y Explosivos (Renar). "Si bien esto se está investigando yo desearía que no fuera así, pero lo importante es que en una investigación no se pueda descartar ninguna hipótesis", estableció.
Lamberto confirmó que en la caja encontrada en el cajero automático de Paraguay al 800 se encontró una bengala y una reloj, simulando un explosivo con un detonador de tiempo. "No era un artefacto explosivo", sostuvo el ministro. "No tenía posibilidad de ser operativo sino más bien con finalidad intimidatoria, para generar alguna alarma".
Lejos de las cámaras. Como dato ponderable destacó que es sugestivo que los que dejan los paquetes tienen la precaución de no exponerse a ser registrados en imágenes. En este caso las cámaras de seguridad del banco fueron inutilizadas cubriéndolas con pintura verde para que no se pudiera identificar a nadie. En ninguno de los otros episodios se recogieron grabaciones que delataran a los autores de los hechos.
El ministro fue preguntado por una denuncia de Carlos del Frade, periodista y ex candidato a diputado provincial por Proyecto Sur, que adjudicó la seguidilla de hechos a elementos internos de la propia Brigada de Explosivos, aunque sin aportar más que su comentario al respecto. "Se van a obtener resultados pero lo importante es no adelantar suposiciones", repuso Lamberto.
Los seis de la serie. El primer episodio de la serie fue el martes 13 de junio pasado, cuando en el frente del Banco Galicia de Alvear y Santiago se halló una caja con un envoltorio negro, que contenía basura. En esa misma jornada, a la mañana, se había encontrado una granada antitanque de fabricación española, frente al banco Macro de Ovidio Lagos y Saavedra.
El tercer evento ocurrió tres días después y el hecho no trascendió. Fue a las 22.30 del viernes 16 de junio, cuando la dotación de turno de la Brigada de Explosivos también debió supervisar la aparición de otro extraño paquete, en lo que fue una falsa alarma. La cuarta ocasión fue el pasado jueves 19 de julio a las 8.30, con otro paquete con basura. La quinta el lunes 23, la semana pasada, cuando dejaron dentro de un paquete una carcaza de granada aunque sin carga ni mecanismos de detonación. La sexta, ayer.