Durante diez días, a partir del jueves 17 de noviembre a las 15, unos 80 testigos darán vida a uno de los juicios orales y públicos más esperados de Rosario: le ejecución de Roberto Pimpi Camino, el ex líder de la barra brava de Newell`s Old Boys. El Pimpi fue asesinado de cinco balazos el 19 de marzo de 2010 en la vereda del bar Ezeiza, que estaba ubicado en Servando Bayo al 1400. El trámite conocerá medidas de seguridad excepcionales que comenzarán a aplicarse desde el mismo umbral de los tribunales hasta el escenario de las audiencias. Estas se desarrollarán en la sala del primer piso de los tribunales ubicada sobre la esquina de Pellegrini y Moreno y sólo se dispondrá de 30 lugares para presenciar las jornadas.
A las audiencias no podrá ingresar ninguna de las 116 personas que figuran en el listado de admisión restringida ordenado por el juez de Instrucción Javier Beltramone de junio pasado. Tampoco los 75 detenidos mayores de edad por los incidentes del 29 de octubre tras el partido de Ñuls con Olimpo de Bahía Blanca en el Coloso del Parque.
Además no podrán asistir aquellas personas que hayan sido citadas como testigos en este juicio, ni antes ni después de prestar su declaración ante el Tribunal. La causa de estos incidentes -la 5171/11- está en manos de la jueza Correccional 5, Marisol Usandizaga, quien aún debe formalizar ese listado.
Tiempo y DNI. Los interesados en presenciar el juicio deberán llegar con tiempo, provistos de su DNI, y hacer la cola por la puerta de ingreso por calle Balcarce. El acceso al público general será limitado por las reducidas dimensiones de la sala.
Los procesados que se sentarán en el banquillo de los acusados son Daniel René Ungaro, Carlos Betito Godoy -procesados como coautores del delito de "homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego"- y Emanuel Suárez, imputado del mismo delito, pero en carácter de partícipe secundario.
El tribunal de enjuiciamiento estará integrado por los magistrados Gustavo Salvador, Julio Kesuani y José Luis Mascali.
Sólo resta determinar por parte de la jefatura de la Unidad Regional II la cantidad de efectivos que se encargarán de la seguridad efectiva en el recinto.
Por su parte Raúl B.; Orlando Toro G.; Alejandro Angelito Negro U.; Carolina O.; Víctor Gordo Plin A.; Diego Lalo T.; Florencia R. y Natalia A., obtuvieron falta de mérito por el delito de encubrimiento agravado.
El crimen de Pimpi. El ex líder de la barra leprosa fue asesinado el 19 de marzo en la vereda del bar Ezeiza donde estuvo reunido con un grupo de allegados. Tras permanecer un par de horas allí, Camino salió a la calle para hablar por teléfono. A las 5.20 de la mañana lo sorprendieron y lo acribillaron de cinco balazos.
El inicio de la investigación se concentró en las personas que estuvieron cerca de Camino aquella madrugada. Ocho personas fueron demoradas pocos días después del crimen. Eran parroquianos y los propietarios del bar más algunos conocidos del ex jefe barrabrava investigados como presuntos entregadores.
Entre ellos figuraba un policía de la Brigada de Investigaciones que llegó a compartir unos tragos con Camino. Todos ellos fueron desvinculados de la causa poco tiempo después.
La causa tuvo un vuelco significativo el 25 de mayo cuando se produjo un procedimiento a la salida del boliche "El Sótano", de Mitre al 700. Allí fueron detenidos los hermanos Lelio y René Ungaro, Carlos Godoy y un muchacho de 22 años apodado Cachorra. Pocos días después se sumó a ese grupo Emanuel Suárez. Lelio recibió falta de mérito porque se comprobó que la madrugada del crimen estuvo en su casa. Lo procesaron por la tenencia ilegal de una pistola 22 sin papeles que llevaba el día que lo detuvieron. Otro que eludió el juicio fue Jonathan C., Cachorra, ya que tampoco se pudo comprobar que haya estado en el lugar del ataque.
Sin puertas cerradas. Nueve días antes del comienzo del juicio oral y público en el caso Pimpi Camino, se conocieron los datos gruesos del operativo de seguridad que demandará uno de los debates penales más esperados en Rosario.
El otro es el caso de Walter Cáceres, el hincha de Newell`s asesinado en una emboscada a los micros de la barra leprosa el 4 de febrero de 2010 sobre la banquina de la autopista a la altura de barrio Las Flores.
El juicio por el caso Pimpi fue diagramado para que se realice por la tarde, evitando así que la seguridad se vea comprometida por las 2.500 personas que a diario deambulan por los pasillos de los tribunales provinciales. De acuerdo a lo que pudo conocerse algunas de las partes en litigio solicitaron que las audiencias se realizara a puertas cerradas, propuesta que fue desestimada por el tribunal.
La TV. Los medios de prensa que cubran las audiencias deberán acreditarse y sólo se permitirán filmaciones en dos momentos del juicio: cuando el juez Salvador, quien presidirá el tribunal, haga la presentación formal y cuando lea la sentencia.
Otro aspecto en el que se pondrá énfasis es en que los miembros de familias con viejos recelos barriales estén sentadas en distintos lugares de la platea.
Fuentes tribunalicias indicaron que los defensores son "corresponsables de los testigos que aporten. La idea es no trasladar al palacio de Justicia viejas disputas barriales", explicó un vocero consultado.
Las medidas de seguridad servirán como antecedente para el otro juicio oral y público esperado en Rosario y que dará comienzo el 12 de diciembre: el del homicidio de Walter Cáceres.