La Rioja. — La hija del comerciante riojano asesinado por una banda, que
presuntamente integraba un juez penal en actividad, sostuvo que el magistrado detenido estaba
permanentemente endeudado, pese a recibir un importante sueldo por ejercer ese cargo y por esto
"continuamente le pedía préstamos" a su papá.
Jeanette Ormeño, hija de Jorge Ormeño, prestamista asesinado el 9 de abril en
Villa Unión, afirmó que su padre había sufrido amenazas hace dos años, cuando se investigaba la
desaparición de la turista suiza Annagreth Wurgler, luego dada por asesinada.
Jeanette pidió que la Justicia investigue más a fondo a "otras personas que
podrían estar implicadas" en el crimen de su padre, por el cual está preso el ex juez Walter
Moreno, sindicado líder de la banda delictiva.
Crimen sin cadáver. Moreno fue el juez que, hace dos años, lideró la
investigación por la desaparición de Wurgler y quien impulsó la hipótesis de que la joven había
sido asesinada tras un intento de violación del empresario hotelero Alcides Cuevas.
En un juicio oral realizado en septiembre pasado, Cuevas fue condenado a 18 años
de cárcel por ese homicidio en un polémico fallo, ya que el cadáver de la mujer nunca fue
hallado.
Ahora, la hija de Ormeño presume que su padre fue asesinado "porque sabía algo
más" sobre ese caso y recordó que había recibido amenazas mientras el ex juez Moreno lo investigaba
e incluso le habían asignado custodia policial.
Pese a las sospechas de la joven sobre la vinculación con el caso Wurgler,
Jeanette no desechó la hipótesis del robo y expresó que el juez detenido "le debía bastante guita"
a su padre. Jeanette comentó además que su padre y Moreno eran amigos, compartían fiestas
familiares y por esa razón, jamás hubieran sospechado de él.
Ormeño apareció asesinado el 9 de abril, en el interior de su camioneta, en el
fondo de un zanjón, sobre la ruta que une a Villa Unión con el poblado de Guandacol, a casi 200
kilómetros de la capital riojana.
El comerciante tenía golpes severos, rastros de haber sido maniatado y estaba
rociado con combustible; la autopsia reveló que murió por un fuerte golpe en la base del
cráneo.
El llamado. De acuerdo a lo reconstrucción realizada por el abogado de la
familia de la víctima, Nicolás Azcurra, Ormeño recibió un llamado el martes 8 a la noche en la que
fue convocado al juzgado para cerrar una venta de cinco cero kilómetros para una repartición
oficial. "Se dirigió al juzgado, allí lo redujeron y sospecho que lo pueden haber dormido porque,
por su personalidad, solamente lo sacaban del auto (para golpearlo hasta matarlo, estando)
dormido", dijo el abogado.
El letrado comentó que Telecom certificó que el ex juez Moreno realizó la noche
del crimen varias llamadas desde su celular, 26 de ellas a Orlando Rodríguez, otro de los
principales sospechosos del crimen, todas captadas por la antena de la empresa telefónica de
Guandacol, muy cerca de la escena del crimen. Además del ex juez y de Rodríguez, también están
detenidos los policías Omar Narváez y Alcides Rodríguez y el ex gendarme Mario Barrios.
Narváez y Rodríguez, según la acusación, "colaboraron" con Moreno en plantar
pruebas para incriminar a otras personas por el crimen de Ormeño, en tanto que Barrios estaría
sindicado como el autor o uno de los autores materiales del homicidio del comerciante. l(Télam)