El adolescente de 16 detenido con dos armas el domingo a la noche tras el tiroteo a un gimnasio de boxeo será indagado por la portación ilegal de armas de guerra pero no por el crimen de Sebastián “Oso” Cejas, asesinado hace dos meses en un robo frente al Hospital Español. Si bien el chico era buscado por el Ministerio Público de la Acusación y a comienzos de mes se hicieron cinco allanamientos para tratar de ubicarlo, el juez de Menores Estanislao Surraco consideró que los indicios remitidos a su área son endebles para endilgarle un homicidio.
Diego L. fue apresado junto con un mayor tras una persecución a un Volkswagen Surán robado el 5 de noviembre donde llevaban dos pistolas calibre 9 milímetros, cajas con municiones y dos chalecos antibalas. Quedó a disposición del juez de Menores que, en el mediodía de este martes, procedía a tomarle declaración indagatoria por la portación ilegal de armas. Según adelantaron fuentes judiciales, prevé mantenerlo en prisión preventiva.
Sin embargo, el juez declinó de formularle imputaciones por alguna participación en el crimen de Cejas, que continuará investigándose en la órbita de la Fiscalía. El magistrado considera que los indicios contra el adolescente son débiles y hasta el momento insuficientes para abrirle una causa penal por homicidio. Surraco interviene en este caso en suplencia del juzgado de Menores 4.
El adolescente fue detenido la madrugada del lunes por policías del Comando Comando Radioeléctrico que detuvieron, tras una persecución, un vehículo robado unos veinte días atrás. Con él fue detenido un joven de 21 años que en estos días afrontará audiencia imputativa. Llevaban dos pistolas del mismo calibre que las usadas horas antes, a las 22 del domingo, en el ataque a tiros contra el gimnasio del mánager de boxeo Carlos Alanis, en Rueda al 2500. Los sospechosos llevaban cajas con proyectiles y dos chalecos antibalas.
A comienzos de noviembre la Agencia de Investigaciones había realizado cinco allanamientos buscando al joven, en base a una serie de indicios que en principio lo conectaban con el crimen de Cejas. En el transcurso de esas medidas se comprobó que era menor y se enviaron actuaciones al juzgado de Menores
Sebastián "Oso" Cejas fue ejecutado de un balazo la medianoche del 21 de septiembre mientras esperaba frente al Hospital Español de Sarmiento al 2800 que su padre terminara de recibir un servicio de diálisis. Esa noche, la mamá del muchacho habló de “tres o cuatro locos” que aparecieron y se abalanzaron sobre su Chevrolet Onix en el que esperaban a su marido mientras estaba recibiendo la prestación de salud en el Español. Los ladrones se llevaron el auto.
La investigación por el homicidio de Cejas tiene a tres detenidos, pero la Fiscalía busca a otros dos sospechosos. El pasado 14 de octubre se llevó adelante la audiencia en la que Leonardo C. y Gabriel O. fueron imputados por los delitos de homicidio en ocasión de robo agravado por el uso de arma de fuego en carácter de coautores y en grado consumado. En tanto, también quedó en prisión preventiva el dueño del depósito donde encontraron al Onix del Oso Cejas, en la zona oeste de Rosario.
A Cristian Fabián B. se le atribuyeron los delitos de encubrimiento triplemente agravado en calidad de autor y consumado; tenencia de arma de fuego de guerra (tres hechos) en calidad de autor y consumado todos en concurso real. A su vez, la Fiscalía busca a dos sospechosos más, que podrían tener relación con el crimen.