Un oficial de 39 años que prestaba servicios en la Unidad Regional I de policía, con asiento en la capital provincial, se presentó el martes ante sus pares de la Policía Federal y quedó detenido acusado de brindar proteccción a un distribuidor de drogas a mediana escala que desde la localidad de Santo Tomé abastecía a quioscos de la ciudad de Reconquista. Para la Fiscalía Federal de esa ciudad tanto ese policía como un cómplice de la misma fuerza apresado la semana pasada "cobraban por protección y abastecían con drogas a los distribuidores" del norte santafesino.
Los hechos, según el portal de noticias zonacriticaonline.com, empezaron a ser investigados en 2014 cuando la Fiscalía Federal de Reconquista y el juzgado de esa ciudad le encomendaron a la Policía Federal del lugar que investigue a un importante distribuidor de cocaína identificado como Carlos "Anteojito" Arce y a su pareja, Romina Sánchez, que se domicilian en Santo Tomé y registraban frecuentes viajes desde la capital santafesina a Reconquista en distintas empresas de transporte.
Escuchas. Del seguimiento de la pareja y de escuchas telefónicas surgió que el organizador y comercializador de la droga era un policía santafesino llamado Gustavo Andrés "Pelado" Grivaldo, de 39 años. Eso, dice el portal de la capital provincial, surgió de las conversaciones entre la pareja y Walter "El gordo" Bustos, otro efectivo de la Unidad Regional I.
En el caso de Grivaldo "se estableció que además de organizar el tráfico de la droga, cobraba cuotas mensuales a distintos distribuidores como así también les proveía parte del estupefaciente con el fin de darles protección y no ser investigados en una eventual causa judicial".
El miércoles 22 de septiembre la Policía Federal de Reconquista tomó conocimiento a través de la División Informaciones de la misma fuerza, a cargo de las escuchas a los investigados que Bustos y Arce, que éstos habían concertado un encuentro para intercambio de drogas y entonces prepararon un procedimiento encubierto con orden judicial. Fue así que se los detuvo en el norte de la ciudad de Santa Fe. En el auto de "El gordo" había 250 gramos de cocaína y una mochila con un chaleco balístico de la División Investigaciones de la URI. A Arce, en tanto, le secuestraron 30 mil pesos y varios celulares que había en su auto.
Roles. Grivaldo, principal investigado no fue ubicado en ese momento y se entregó anteayer en el juzgado federal de Aldo Alurralde, en Reconquista, con el patrocinio del abogado Claudio Torres del Sel, quien además representa a Bustos, por lo que se supone una estrategia defensiva común. Por cierto, para la fiscal Viviana Bruno Campaña, no hay dudas de que "Grivaldo es el encargado de conseguir el estupefaciente, siendo la función del "Gordo" Bustos la de distribuirlo a los clientes que poseen en común, como así también de conseguir nueva clientela".
La detención de la pareja en Santo Tomé y de Bustos en el norte de la ciudad de Santa Fe no fue la única medida pedida por la Justicia Federal el pasado 22 de noviembre. En los domicilios de Arce y Sánchez no se secuestró droga pero si una balanza de precisión, celulares y chips. En el domicilio de Bustos se hallaron 206 gramos de cocaína, una máquina para contar dinero, seis gorras de policía, municiones y un celular.
En cuanto a Grivaldo, el domicilio detectado por personal de investigación resultó ser el de su madre y no secuestraron nada allí, no obstante se solicitó al juez la detención e indagatoria del oficial porque del curso de la investigación quedaba claro que era el organizador y uno de los eslabones más altos en la cadena de tráfico ilícito de drogas, valiéndose para ello (al igual que Bustos) de su rol de policía.