Dos hermanos fueron condenados a diez años y ocho meses de prisión por el crimen de Carlos Fernando Gómez, ocurrido en febrero de 2018 en el barrio Irigoyen. Matías Gabriel Centurión, de 28 años, y Angel Eduardo Centurión, de 42, admitieron su culpa mediante un juicio abreviado acordado entre el fiscal Miguel Moreno y la defensora pública María Laura Blacich.
El acuerdo fue presentado en la audiencia preliminar al juicio oral ante la jueza Silvia Castelli, quien aceptó las imputaciones y las penas propuestas por el delito de homicidio agravado por el uso de arma de fuego en concurso real con portación ilegítima de arma de uso civil. Matías, fue sentenciado como autor mientras que su hermano fue condenado como partícipe necesario.
Padre de tres hijos y empleado municipal, “Coco” Gómez fue asesinado la noche del 21 de febrero de 2018 en Pago de los Arroyos al 6600, en zona sur. Cerca de las 21 la víctima y un hermano pasaron por allí rumbo a la casa de su padre cuando se cruzaron con Matías. Coco lo conocía de chiquito, habían sido amigos hasta que la venta de una cámara que Centurión no le había terminado de pagar generó una bronca.
El cruce de Coco y Matías generó una discusión que terminó cuando éste entró a un quiosco donde su hermano le alcanzó una pistola calibre 22 largo con la cual el salió y disparó al menos tres veces. Carlos recibió un balazo en la axila izquierda y otro en una pierna. Horas después murió en el Hospital Sáenz Peña.
La primera versión que aportó el hermano de Coco señalaba que éste habían quedado en medio de un fuego cruzado entre bandas. Pero luego admitió en Fiscalía que había inventado ese relato porque estaba muy asustado, ya que el crimen había sido perpetrado por un conocido del barrio al que identificó: se trataba de Matías Centurión.
En ese sentido, también por esos días los vecinos de la cuadra donde sucedió el crimen habían demostrado su reticencia a hablar con la prensa. “No podemos contar nada porque en el barrio nos conocemos todos y no queremos que nos terminen baleando el frente de la casa”, resumió un vecino del barrio Irigoyen, un triángulo delimitado por las calles San Martín, Pineda y la colectora de la circunvalación, en el extremo sudeste de la ciudad.
Detenidos
Meses después, en octubre de 2018 Matías fue detenido en Funes cuando interceptaron la moto en la que iba y los policías constataron que tenía pedido de captura por el crimen de Gómez. Dos días después la fiscal Georgina Pairola imputó al joven, que se dedicaba a la herrería.
La defensa pidió no tener en cuenta el testimonio incriminante del hermano de Coco por haber sido formulado dos meses después del hecho, pero la fiscal alegó que esa versión coincidía con evidencias colectadas en la escena del crimen.
Por su parte, Angel fue apresado en abril pasado. El fiscal Moreno imputó a este albañil como partícipe necesario por haberle entregado a su hermano el arma homicida.
Los hermanos quedaron con prisión preventiva en Piñero. Días atrás, en el inicio de la audiencia preliminar al juicio oral, las partes presentaron el procedimiento abreviado acordado. Entonces se dictó un cuarto intermedio para analizar los términos y se reanudó la audiencia en la que el fiscal hizo un breve relato respecto del acuerdo, la defensa ratificó lo acordado y los acusados prestaron su conformidad.