Lo que comenzó como un allanamiento en el que se buscaban elementos robados en un escruche cometido en jurisdicción de la comisaría 19ª derivó en el secuestro de una poderosa pistola ametralladora FMK3 y otra calibre 9 milímetos robada en la ciudad cordobesa de Villa María. Fue ayer, en una vivienda del barrio La Bajada, en la zona sur de la ciudad. En el operativo hubo dos detenidos que intentaron escapar por los techos llevándose las armas. Según voceros policiales, uno de los apresados estaría implicado en el escruche investigado.
El allanamiento se realizó en una vivienda de Ingeniero Huergo al 4700 (detrás del ex Batallón 121). La investigación se había iniciado el lunes 10 de septiembre pasado cuando un vecino de barrio Villa Urquiza denunció en la comisaría 19ª que su casa de Camilo Aldao y Ocampo había sido escruchada (asaltada en ausencia de sus residentes).
Según la denuncia original, los maleantes se llevaron efectos personales de los dueños de casa, electrodomésticos y dinero. La causa quedó a cargo de la comisaría 19ª y la brigada de Investigaciones, a oídos de quienes llegó el apodo de Cordobés. Con el correr de los días, a ese alias se le sumó el nombre, el apellido y la dirección del sospechoso. Así, ayer al mediodía con una orden de allanamiento de la jueza de Instrucción Raquel Cosgaya, efectivos de la Agrupación Cuerpos y Unidades Especiales además del Comando Radioeléctrico llegaron a Ingeniero Huergo al 4700 para cumplir la medida.
Por los techos. Cuando los vigilantes ingresaron a la casa, dos hombres subieron a los techos y emprendieron la fuga. Uno de los policías del Comando vio lo que ocurría y que uno de los evadidos llevaba la FMK3, por lo que dio la voz de alerta. En un momento de confusión se pensó que en una de las viviendas vecinas los maleantes podrían haber buscado refugio y tomado rehenes, lo que aumentó la angustia y la ansiedad de los pesquisas. Por eso, en minutos la cuadra se pobló con una decena de patrulleros y autos policiales además del subjefe de policía provincial, comisario Cristian Sola, y las máximas autoridades de la fuerza rosarina, Walter Miranda y Hernán Brest..
Los sospechosos finalmente fueron detenidos dos casas más allá, en un lavadero industrial. Además de la "metra" con su cargador completo llevaban una pistola calibre 9 milímetros flamante con su numeración intacta. Los apresados fueron identificados como Alejandro José G., de 37 años y apodado Cordobés, y Juan Manuel N., de 26 años y domiciliado en inmediaciones de Colón y Uriburu.
Además de las armas la policía requisó un Chevrolet Meriva azul e incautó una caja de municiones calibre 9 milímetros en la que había 15 proyectiles.
A pericias. "La verdad es que esta zona es súper complicada. Nosotros no hace mucho tiempo que vivimos aquí, pero cuando consigamos otro lugar nos vamos. Es muy difícil y todos las noches son balazos de un lado y del otro", analizó una mujer de la cuadra. Los detenidos fueron acusados, en principio, por el escruche al domicilio de Villa Urquiza. Pero su suerte está ligada estrechamente a los resultados de las pericias sobre las armas, preferentemente la FMK3.
Es que un arma como esa fue utilizada en la trágica emboscada a los colectivos de la barra de Newell's, la madrugada del 4 de febrero de 2010 en la autopista a Buenos Aires, a la altura de barrio Las Flores, en la que fue asesinado Walter Cáceres. Una arma similar fue usada en el triple crimen de Villa Moreno, el pasado 1º de enero, causando la muerte de Jeremías Trasante, Claudio Suárez y Adrián Rodríguez. También los investigadores estimaron que se utilizaron "metras" en los crímenes de Germán Armanino (en mayo de 2011 en Uriburu y pasaje Medici); y en el de Cristian Omar Moroco Ferreyra, el pasado 5 de junio en un pasillo donde funcionaba un quiosco de venta de drogas, en Patricias Argentinas al 4100. También se hablo de "metras" en los últimos ataques a balazos contra las vidrieras de concesionarias de autos y en los tres hecho cometidos contra el frente de la vivienda de Rosa Caminos, hermana del Pimpi.
La FMK3 es una pistola ametralladora de fabricación nacional utilizada por fuerzas de seguridad como la policía santafesina que en la calle se reconoce como "la metra". Es un subfusil que utiliza munición calibre 9 milímetros, como las pistolas reglamentarias de la policía, diseñado y fabricado por la Fabrica Militar Domingo Matheu que supo funcionar en el actual edificio de la Jefatura de Rosario. El arma secuestrada ayer tenía un cargador para 40 balas con un alcance efectivo, es decir la posibilidad de acertar a un blanco determinado, de 100 metros. Y una cadencia de tiro (cantidad de proyectiles disparados) de 600 disparos por minuto.