En una serie de allanamientos hechos durante la madrugada del martes, personal de la Policía de Investigaciones (PDI) bajo las directivas judiciales de la fiscal Georgina Pairola desbarataron una banda integrada por un peligroso ex convicto y seis personas más que, por medio de escruches y entraderas, cometieron distintos hechos en Rosario y otras localidades del sur provincial. Entre lo incautado por los pesquisas, a cargo del comisario Marcelo Marcos, se destacan armas de grueso calibre, varios equipos de electrónica, tres autos (uno robado el mes anterior en Rosario), documentos falsos y una gran cantidad de ropa.
La banda, según dijeron las fuentes, estaba liderada por Joel Puchetta, un convicto evadido de la cárcel de Rosario en 2012 mientras cumplía una pena por homicidio (ver aparte). A él lo secundaban Roberto B., Julián P., Juan N., Alejandro P., Jimena V. y Gustavo C., todos ellos apresados en los operativos de ayer.
Según explicaron fuentes de la investigación, todo comenzó cuando una mujer que trabaja en un ente público con acceso a información privilegiada de los ciudadanos fue amenazada por uno de los hampones para que le otorgara información que facilitara la concreción de los golpes. Esa denuncia posibilitó que por medio de "seguimientos y un fuerte trabajo de inteligencia", los policías comenzaran a desarticular acciones de la banda, que era seguida día y noche, filmada y grabada en su andar. Así se pudo saber que la banda había cometido una serie de hechos en las localidades de Arroyo Seco, Marcos Juárez, Villa Constitución, San Nicolás y también en Rosario.
Tres meses. Víctor Moloeznik, Subsecretario Organizador de la Policía de Investigaciones, sostuvo que "llevó tres meses cercar a la banda y fue un gran golpe el dado. Tenían mucha logística y datos muy precisos. No era una banda que fuera a tirar la puerta abajo para robar una casa. Eran muy profesionales y estamos satisfechos con la acción policial".
"La banda la conformaban seis personas, cada una con un rol determinado. La lideraba Joel Puchetta y su ladero era Roberto B. Por su parte Jimena V., la esposa de Joel, también tenía una activa participación. Lo que distingue a esta banda de otras similares es que lograban datos precisos sobre distintos movimientos de dinero. Un caso emblemático es el de un anciano al cual fueron a robarle una cantidad determinada de plata que, al no encontrarla en la casa como ellos suponían, los hizo retirarse sin llevarse nada", sintetizó Moloeznik.
Para la policía el trabajo fue muy farragoso: "Hubo que hacer seguimientos, filmaciones, poner piezas sueltas en su lugar y hasta partir de un seudónimo para llegar a un nombre y apellido, una dirección exacta. Lo importante era lograr la evidencia necesaria para que cuando se llegue a la audiencia imputautiva (sería hoy a la tarde) la causa no se caiga", afirmó el comisario Marcelo Marcos, a cargo de la Policía de Investigaciones de Rosario.
Allanamientos. Así es que se llegó a los cinco allanamientos realizados la madrugada de ayer. Los más importantes fueron en Cervantes al 700, en Villa Diego, dónde se secuestró un Chevrolet Cruze, se incautaron armas de grueso calibre y se detuvo a Joel Puchetta y a su esposa Jimena V. "En ninguno de los procedimientos los detenidos se resistieron, pero en el de calle Cervantes la característica es que la puerta tenía muchísimas trabas, como para dar tiempo al sospechoso a escapar, pero no pudo hacerlo", destacó Marcos.
Otro allanamiento fue en Arroyo Seco, en una zona alejada del centro, donde fueron detenidos Juan N. y Alejandro P. y se secuestraron escopetas, un revólver calibre 38 y otro calibre 32 además de un Ford Fiesta Max. Un tercer allanamiento se hizo en Villa Constitución donde cayó Gustavo C. y se incautaron, entre otros elementos, una pistola 11.25 y una escopeta.
En los restantes allanamientos se encontraron máquinas fotográficas, chequeras, dos revólveres calibre 38, un pistolón, un Ford Focus Gris robado el mes anterior en jurisdicción de la seccional 6ª de Rosario, ropa de todo tipo, relojes, alhajas, electrodomésticos, pasaportes y dinero en efectivo, aunque no mucha cantidad.
Ayer a la tarde unos 40 efectivos se desplazaron a distintas localidades donde continuaban con una serie de operativos y no se descartaba que se realizaran nuevos allanamientos y detenciones. "Lo importante de esta banda es que contaban con informantes en distintos lugares, inclusive gente que estuvo ligada al delito y ahora tenía trabajos legales. Se manejaban con mucha logística y muchos datos, esos los hacía eficientes", dijo una alta fuente policial.