Matías Leandro Núñez, de 25 años, fue condenado ayer a la pena de 15 años de cárcel al ser hallado responsable del homicidio agravado por el uso de arma de fuego de Adrián Gabriel Pineda, ocurrido el 20 de octubre de 2017 en la zona de Vieytes y Caracas, en la zona noroeste de la ciudad de Rosario.
El dictamen fue emitido por los jueces de primera instancia Rodolfo Zvala, Marcela Canavesio y Carlos Leiva tras un juicio oral y público desarrollado en el Centro de Justicia Penal. El fiscal Luis Schiappa Pietra había solicitado una pena de 19 años de prisión y la defensa del imputado, a cargo de María del Carmen Varela, pidió la absolución al sostener que su cliente no estaba en el lugar de los hechos.
"Fue Matías, el me pegó", alcanzó a decir Pineda a su novia mientras agonizaba en el piso tras recibir un disparo en el pecho y otro en una pierna. La víctima no dudó en apuntar a Núñez, un joven vecino de la chica, en el barrio Nuevo Alberdi, con el que había tenido problemas y que lo había amenazado dos meses antes en ese mismo lugar.
Núñez estuvo cinco meses prófugo y con pedido de captura hasta que lo detuvieron en un control rutinario de tránsito. Fue imputado por el crimen el 17 de marzo de 2018 y desde entonces está preso.
"No entiendo porqué lo hizo. Quiero saber porqué", pidió en la primera jornada del debate oral Yoana, novia de la víctima, al declarar como testigo. Ella fue la primera en asistir a Pineda y lo acompañó en el auto de un vecino hasta el Hospital Alberdi. Contó que en el trayecto su novio identificó al agresor como Matías, a quien también conocían por el sobrenombre de "Guaso". Por la gravedad del cuadro, el tiro por la espalda le había afectado un pulmón, el joven fue derivado al Hospital de Emergencias Clemente Alvarez, pero falleció en el camino por un shock hemorrágico.
El Fiscal Dr. Luis Schiappa Pietra de la Unidad de Homicidios, acusó formalmente a Núñez por el hecho y contó que la víctima fue en su auto a buscar a su novia Yoana, que había visitado a su madre y sus hermanos en una casa de las inmediaciones de Vieytes y Caracas.
El muchacho bajaba del auto para dirigirse hacia la casa de su suegra cuando, según la acusación fiscal, Núñez se le acercó por la espalda y le efectuó dos disparos. Uno lo hirió en una pierna y otro le atravesó el tórax.
No obstante, la defensora de Núñez sostuvo que su cliente estaba en un cumpleaños en la casa de su novia, a dos cuadras del lugar del crimen. "Nunca hubo problemas, nunca hubo denuncias, son chicos de la misma edad que se conocen de la zona. Cuando lo detuvieron, mi cliente estaba yendo a trabajar con el padre en una cooperativa de la Municipalidad. Jamás se lo vio con un arma ni se le encontró una munición", dijo la abogada. Pero no le alcanzó eso como prueba y el tribunal decidió condenar a Núñez como autor del homicidio.