El día después de los últimos ataques contra los Tribunales provinciales y el Centro de Justicia Penal (CJP), la Tropa de Operaciones Especiales (TOE) realizó una serie de allanamientos en búsqueda de sospechosos de financiar y ejecutar esas balaceras. Así, viejos apodos y nombres ligados al hampa local saltaron una vez más del archivo a las crónicas policiales. Todo bajo el mismo telón de fondo: la banda de Los Monos es la principal sospechosa de atentar contra las instituciones en las que la mayoría de sus integrantes fueron investigados, juzgados y condenados. Entre los ocho lugares allanados, la TOE exploró la casa de Yalil Roberto A., un hombre de 41 años investigado como agente económico de grupos delictivos con residencia en Balcarce al 3700. También fueron allanados los domicilios del barra brava de Newell"s Nelson "Chivo" S. y la casa de uno de sus hermanos.
En uno de los ataques a balazos perpetrados la madrugada del lunes, un cartel quedó en la escena del crimen. Fue sobre las escalinatas de los viejos Tribunales de calle Balcarce al 1600: "Con la mafia no se jode. Atte: Esteban Alvarado", mencionando así a un empresario que purgó una condena por robo y desguace de autos de alta gama y que por estos días se encuentra prófugo de la Justicia, que lo investiga por el reciente crimen del prestamista Lucio Raúl Maldonado, quien al ser hallado el pasado 13 de noviembre en la colectora de Circunvalación y bulevar Oroño, tenía junto a su cuerpo un cartel similar, pero sin firma.
En ese marco, en una rueda de prensa, el jefe de la TOE, comisario Maximiliano Bertolotti, dijo al respecto y con cierta ironía: "No lo sabemos (si Alvarado está detrás de los atentados) pero, sin llegar a hacer un análisis muy profundo, nadie se inculparía y pondría su nombre en un cartel así".
Desde el 29 de mayo pasado, cuando dos propiedades que pertenecieron al juez Ismael Manfrín, quien presidió el tribunal que en la provincia condenó al núcleo duro de la banda de Los Monos, la violencia en la ciudad de Rosario comenzó a escribir una página de ataques a balazos sobre edificios o viviendas donde habitaron funcionarios judiciales ligados a la investigación, el juzgamiento y la condena al grupo nacido en el barrio Las Flores. Fueron 15 los ataques a balazos denunciados contando los dos del lunes contra los Tribunales y el Centro de Justicia Penal.
La investigación del Equipo de Gravedad Institucional creado por la Fiscalía Regional para esclarecer esos ataques le imputó a Ariel Máximo "Guille" Cantero la autoría intelectual desde su celda en la cárcel de Piñero de al menos siete de esos hechos. Otras diez personas también fueron imputadas por diferentes episodios, tales como Daniel "Teletubi" Delgado (instigador en dos), Matías Nicolás César (instigador en cinco episodios) y Lucía Uberti, a quien le atribuyen haber planeado y coordinando "la faz operativa" de al menos ocho hechos, organizando a los tiradores que concretaban los ataques.
Sólo una pistola
Luego de las balaceras del lunes de madrugada, los fiscales del Equipo de Investigación de Gravedad Institucional a cargo de Miguel Moreno, Matías Edery y Aníbal Vescovo ordenaron una serie de allanamientos que dejaron en manos de la TOE. Por "información reservada", eufemismo que utilizan los pesquisas para blanquear dichos de sus informantes de calle, desplegaron na serie de allanamientos en la zona sur y, aunque no hubo detenidos, lograron secuestrar dinero, teléfonos celulares, una camioneta, una pistola calibre 9 milímetros y documentación de interés.
En una vivienda de Balcarce al 3700, en el barrio Moreno, fueron sobre la figura de Yalil Roberto A., un hombre que fue descripto por los investigadores como un "agente económico de grupos ilícitos", que maneja "una mesa de dinero ubicada a unas 30 cuadras del centro". De esa persona se dijo que era quien blanqueaba los activos del asesinado Rubén Ariel "Tubi" Segovia. A Yalil Roberto A. le incautaron una pistola marca Taurus calibre 9 milímetros que tenía con todos los papeles en regla y será peritada para determinar si fue utilizada en algún dellito. También le incautaron apróximadamente 20 mil pesos en efectivo, cheques, celulares, computadoras y alhajas de oro. Otros tres domicilios de allegados a ese personaje también fueron requisados, pero con resultado negativo.
En una vivienda de San Nicolás al 3700, en barrio Acíndar, allanaron la casa de Nelson "Chivo" S., quien fuera sucesor de Diego "Panadero" Ochoa al frente de la barra brava de Newell's. El "Chivo" fue uno de los jefes de la barra entre el 20 de agosto de 2013, cuando el "Panadero" cayó preso, y mediados de 2015, cuando él y su entorno recibieron una serie de ataques que lo jaquearon y lo alejaron lentamente del juego. De la casa del "Chivo" secuestraron celulares y una notebook. También en barrio Acíndar allanaron el domicilio de uno de sus hermanos, de donde se llevaron un celular.
Otro domicilio al que llegaron los TOE fue el de Chacabuco al 3500, en barrio Tablada, en el que reside un joven de 16 años que el 1º de enero pasado, cuando aún tenía 15 años, fue sindicado como autor del homicidio de Joel Tejera. La víctima, de 20 años, fue asesinada a balazos en Servellera al 3900, en el barrio Nuevo Alverdi. Al ser menor de 16, en ese momento no fue imputado. De su casa secuestraron varios teléfonos celulares. Todo el material incautado fue puesto a disposición de la Fiscalía quien analizará qué temperamento adoptará.