Un joven fue acribillado en horas de la tarde en el barrio 7 de Septiembre en lo que se especula sería un ataque con tinte mafioso. El cuerpo del muchacho, de 19 años, quedó tendido en la vereda durante un largo tiempo hasta que llegó la policía para realizar las averiguaciones de rigor.
En lo que va del año es el homicidio número 71 en el departamento de Rosario.
La víctima (Rodrigo Alejandro Soraire, de 19 años) fue ultimada esta tarde con una disparo de arma de fuego en la zona del tórax cuando se encontraba tomando una gaseosa en la vereda.
Según los primeros indicios, el agresor llegó al lugar en un vehículo, del cual la Fiscalía se reservó las características aportadas por razones de investigación, y luego del ataque se dio a la fuga.
Si bien el homicidio está en plena etapa de investigación, las voces recogidas por La Capital indicaron que se trataría de un problema por venta de drogas. "Acá hay mucha venta y existen varios soldaditos", contaron algunos vecinos del lugar que transitan el día a día con mucho temor por todo lo que sucede en el barrio.
Si bien existe mucho hermetismo en la zona, trascendió que podría tratarse de "algún ajuste de cuentas" por la manera en la que fue ultimado el muchacho y por los rumores que hace tiempo circulan por el barrio.
Uno de los vecinos del barrio 7 de Septiembre relató que el joven era de la zona y lo conocía porque hacía unos meses "le habría robado la billetera".
Intervino en el caso la subcomisaría 21ª y el fiscal de Homicidios Dolosos en turno, quien solicitó la intervención del Gabinete Criminalístico para relevamiento de cámaras en la zona del hecho y toma de testimonios, al tiempo que ordenó el envío del cuerpo al Instituto Médico Legal para realizar la autopsia.
Es el segundo integrante del grupo que ingresó por la fuerza a la casa de Ángel Acuña, donde lo mataron a balazos luego de reducir a sus familiares
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