En la localidad de San Jerónimo Sud se colocaron este martes 100 dosis contra el Covid-19 y la vacunación ya alcanzó al 72% de los vecinos mayores de 18 años. De esta manera se lograron números considerados de inmunidad rebaño, guarismos a los que aspira llegar la Nación en unos meses.
Este porcentaje corresponde a primeras dosis aplicadas a 1.691 sanjeronimenses. Las personas más jóvenes que recibieron la vacuna tienen 36 años. En tanto, los adultos que cuentan con las dos aplicaciones son 450 y representan el 20% de la población.
A la alta cantidad de vacunados se suma la iniciativa del gobierno local que optó por incorporar estrategias centradas en la prevención, iniciando una campaña para que todos los vecinos puedan hisoparse de manera gratuita y sin la necesidad de presentar signos.
Más de 900 hisopados se realizaron en los primeros meses del presente año y sólo en lo que va de junio, cerca de 200. En tanto, la campaña de vacunación contó con una fuerte inversión en el área de salud. A principios de 2021, se incorporó un nuevo equipo de profesionales sanitarios especialmente dedicados a trabajar sobre la pandemia.
“La estrategia fue clave para hacerle frente a la segunda ola del Covid-19 ya que se sumaron también nuevas herramientas y medidas preventivas a las capacidades ya existentes”, comentó el presidente comunal Horacio Ciancio.
En esa línea, consideró que el control gratuito solventado con fondos propios “es fundamental para poder detectar a tiempo la enfermedad y aislar a los contactos de manera rápida, lo que ha permitido contener los contagios y bajar el porcentaje de los mismos en la localidad”, que alcanza los 3.500 habitantes.
El equipo sanitario es también el encargado de llevar el seguimiento y control de los pacientes con Covid, acompañándolos en todo el proceso para atravesar la enfermedad y disponiendo de los medios para la atención que requieran.
Esta medida incluye un área de atención específica proporcionada desde la comuna y por afuera de las instalaciones del Samco, permitiendo que el personal del efector público pueda estar disponible para el tratamiento de otras afecciones y continuar brindando los servicios habituales sin exponer a los vecinos al virus.