Por momentos deja de lado la veta de jugador profesional y apela a un discurso popular. Pablo Alvarez se expresa como si fuese un fervoroso hincha canalla más. "No tengo dudas de que vamos a cerrar el año con un Central campeón", aseguró de manera espontánea mientras dialogaba con Ovación sobre la final de la Copa Argentina que se avecina frente a River en Córdoba. El presente del defensor es Racing porque debió emigrar de estos pagos en el reciente receso invernal por un tema estrictamente personal. Pero no se olvida de Arroyito. "Yo no aprendí a que querer al club. Me enamoré de Central. Esa es la palabra y realidad", remarcó sin dudar para luego confesar que "la noche del jueves seré el primer hincha en alentar. Lo veré por televisión desde mi casa porque lamentablemente no puedo viajar por varios motivos".
¿Cómo ves a la distancia la final que está por jugar Central?
En primer lugar muy contento porque el equipo llegó a una nueva final. Me pone muy feliz por Central, los compañeros y el Chacho. Ellos vienen haciendo un trabajo muy bueno desde hace tiempo y ojalá puedan coronarlo esta vez porque se lo merecen.
¿Vas a sufrir viéndola desde afuera?
Por supuesto. La noche de la final seré el primer hincha alentado. Lo veré por televisión desde mi casa porque lamentablemente no puedo viajar por varios motivos. Aunque en más de una oportunidad pensé en ver si podía ir a Córdoba. Pese a todo seré el primero en que estará alentando a los muchachos.
¿Cómo viviste este proceso en estos meses en el que el equipo tiene un protagonismo en la Copa que no logró en el torneo largo?
Pasa que la Copa te abre puertas internacionales y cada vez más los equipos le están dando muchísima más importancia. Central está siendo protagonista, pero no desde este año sino en los últimos tres. De hecho, será la tercera final que juguemos. Ojalá que contra River nos podamos sacar esa espina. En especial por ese grupo que está dejando muy bien representando al club.
Te diste cuenta de que estás hablando como hincha más.
Sí, es verdad. Pero no me doy cuenta. Me sale así. Hablo como si fuese uno más. Un hincha más.
Se ve que aprendiste a querer mucho a Central.
No, no. Yo no aprendí a que querer al club. Me enamoré de Central. Esa es la palabra y realidad. Sos dos cosas distintas y nadie se tiene que sentir ofendido ni nada por el estilo.
¿Ya hablaste con algunos de tu ex compañeros?
Sí, en realidad estoy siempre en contacto. Si no hablo con el Loncho (Ferrari) lo hago con otro amigo. Desde ese punto de vista siempre estoy cerca. Aunque a la vez sé que no debo invadir en estos momentos porque se están preparando para un partido muy significativo y ellos tienen que estar muy metidos en esa final.
¿Cómo tomás cuando se remarca que si estuvieran Donatti y Pinola y vos, la defensa no tendría tantos inconvenientes o sería más segura?
Es lindo que se acuerden de uno. Pero también hay que bancar a los que están. Soy el primero que los alienta. Acá lo más importante es que Central pueda coronar algo en pocos días. Eso es el único objetivo y lo único más importante para todos nosotros.
¿Juega en la cabeza del jugador el hecho que se perdieron dos finales seguidas y encima ahora estará River, que además de ser un grande, buscará ganar la Copa por primera vez y meterse en la Libertadores?
Trato de no pensar en eso. Sino se perdería la magia del fútbol. Creo en el fútbol y en este plantel porque es extraordinario. No tengo dudas de que los muchachos cerrarán un gran ciclo. Central es grande y tiene peso propio. Y contra eso no hay nada para discutir o comparar.
Cuando hablás de cerrar un ciclo también abarca la clasificación a la próximo Copa Libertadores. ¿Eso podría abrir la puerta a tu regreso a Arroyito?
No, sinceramente no se me pasa en estos momentos por la cabeza algo así. Por una cuestión de respeto a Racing, sobre todo. Pero a la vez no puedo engañar a mi corazón diciéndote que no me gustaría volver porque sería un hipócrita. Lamentablemente hay un montón de cosas y factores que influyen en la actualidad como para sentarme y analizar un posible regreso seriamente. A veces uno debe resignar cosas.
¿Qué cosas extrañás de Central?
Todo. Mis compañeros, a los utileros, a los médicos, al cuerpo técnico, al canchero, a la gente del country. Extraño todo realmente. Pasa que cuando uno ama algo y de repente debe irse por cuestiones extrafutbolísticas, se hace todo cuesta arriba después. Es como que extrañás el doble de lo normal. Por eso siempre llevaré a Central en mi corazón toda la vida.
¿Se puede decir que en Arroyito encontraste tu lugar en el fútbol pese a que jugaste en Boca, Estudiantes y en Europa?
Es así. De hecho lo dije en varias oportunidades que me enamoré de Central. Soy además un agradecido por cómo me trató el club, la gente y dirigentes en las etapas que estuve. Imposible no sentirme identificado con esos colores. Por eso soy reiterativo, pero deseo que podamos coronarlo con un título.
Teniendo en cuenta la proximidad del partido contra River, ¿qué mensaje le dejarías a la gente entonces?
Ellos están tan ilusionados como yo. De eso no hay dudas. Pero que los hinchas se queden tranquilos porque este grupo tiene mucha hambre de gloria. Creo y confío en este plantel porque tiene mucha jerarquía. Central jugará la tercera final seguida y no todos los clubes tienen esa chance de hacerlo. No tengo dudas de que vamos a cerrar el año con un Central campeón.
¿Como hincha te quedás más tranquilo ahora que Teo Gutiérrez demostró estar bien contra Belgrano en Formosa?
Es que Teo es un jugador de jerarquía y experiencia. El Chacho lo remarcó muchas veces. Hay que bancarlo porque es el jugador que te puede hacer campeón.