La jerarquía de Tevez hizo la diferencia y Boca se puso 2 a 0. El Apache también fue partícipe de una jugada muy polémica, en la que fracturó al juvenil Ezequiel Ham al poner la pierna fuerte en la disputa de la pelota (no pareció que fuera con mala intención). Y si bien Argentinos Juniors ya había descontado, casi nada pasó hasta el final, cuando Jonatan Calleri aseguró los tres puntos con el 3-1 para que Boca se afirmara como puntero del torneo, manteniendo la ventaja sobre Central (el tercero) y obligando a su escolta San Lorenzo a ganar mañana para que nada cambie en el final de la 25ª fecha.
Carlos Tevez marcó la apertura a los 45’, cuando inventó una jugada totalmente fuera de contexto: buscó el espacio y desde afuera del área sacó un estupendo derechazo que se clavó junto al palo derecho. Era demasiado premio para la visita, ya que Argentinos fue el mejor en el primer tiempo, el que estuvo más cerca del gol.
Tanto que sobre los 26’ una grave falla de Orion, que pretendió dejar salir la pelota y permitió que se la ganara Lenis, derivó en un rechazo muy exigido de Daniel Díaz cuando llegaba Rinaldi. Y a los 43’ una acción local finalizó en gol de Franzoia, tras gran maniobra de Cabral, pero fue incorrectamente invalidado por posición adelantada. Por ese entonces, lo que todo Boca esperaba era llegar al descanso, pero su mejor jugador le dio una diferencia que nadie podía prever.
Justamente, el distinto, el de categoría, fue quien estiró las cifras. Rápido, a los 53’, tras una buena jugada en la que quedó mano a mano con el arquero tras una gran habilitación del uruguayo Lodeiro.
Ese 2 a 0 convertido por el 10 fue el golpe que le faltaba a Bicho de La Paternal, que desde el arranque del segundo tiempo jugó con diez por la expulsión de Lenis. Es que en el entretiempo, el referí le mostró la roja por un golpe de puño a Lodeiro, aunque el colombiano salió igual al campo de juego, produciéndose un tumulto que demoró el inicio del segundo tiempo.
Igual, al minuto del segundo grito xeneize, descontó Ham, aprovechando un quedo de la defensa xeneize y del arquero Orion, y el partido entró a jugarse en un clima de agresividad que el árbitro Luis Alvarez no supo resolver. Claro, mucho tuvo que ver la jugada entre Ham y Tevez.
En ese contexto, el desarrollo del juego se hizo poco claro, aunque por la ventaja numérica en el campo de juego y en el resultado, no por inteligencia en la elaboración de las maniobras, las mejores chances las tuvo Boca.
Y el equipo del Vasco Arruabarrena cerró el partido con una corrida de Calleri, tras un error del fondo local, en el segundo minuto adicional, para tranquilizar al pueblo boquense, que finalizará como líder la fecha y esperará una ayudita de Racing para escaparse de su escolta San Lorenzo.