Algunos de los nubarrones que aparecían en el horizonte inmediato de Central con los contratos de algunos jugadores parecen irse disipando de a poco. Es que tanto el defensor Nahuel Valentini como el volante Martín Rivero están más cerca de firmar sus respectivos contratos, lo que le aportará tranquilidad a las partes involucradas. Y sobre todo al cuerpo técnico, quien en caso de confirmarse esto mantendría la base del equipo que quedó en los puestos de promoción en la primera parte del torneo de la B Nacional.
La situación contractual que parece más avanzada es la de Nahuel Valentini, por cuyo vinculo mñana se reunirían los dirigentes con el representanet del jugador, Claudio Curti, quien vuelve de Europa, para tratar de cerrar un acuerdo en el que se viene hablando desde hace casi tres meses. Hay un principio de acuerdo y el acuerdo final podría sellarse mañana.
De esta manera, el defensor, quien públicamente confirmó que quería quedarse en el club "para ascender con Central", pasaría a duplicar prácticamente el contrato que tiene en la actualidad.
El otro caso que avanzó un poco es el del volante ofensivo Martín Rivero. Y en esto no tiene tanto que ver las negociaciones que llevan adelante los directivos con uno de los representantes del jugador, Martín González -es socio de Cristian Le Bhian, que está muy distnaicado con Norberto Speciale, puesto que se llevó del club a Milton Caraglio y a Ignacio Bogino-, sino más bien la actitud del jugador, quien le pidió a su intermediario que haga lo posible para arreglar su contrato con el club, puesto que quiere seguir jugando en Central.
Esto destrabaría también la actitud de su representante, quien el miércoles tras reunirse con la dirigencia no se había ido muy conforme con la propuesta dirigencial y le hizxo llegar una contraoferta.
Es por eso que la decisión del jugador, a quien le duplicarían el contrato, es fundamental para destrabar la situación, especialmente porque el volante no quiere quedar parado hasta junio de 2012 en caso de que no arregle con Central.
Esto tiene que ver con que, si bien nadie lo dijo públicamente, la idea de la dirigencia sería la de no llevar a la pretemporada a los jugadores que no arreglen su contrato.
Diferente es la situación de Jorge Broun, por quien las negociaciones están estancadas, no hubo avances y hace bastante tiempo que las partes no se reúnen, por lo que es difícil que se llegue a un acuerdo. No obstante, este sería uno de los pocos -sino el único- que podría seguir jugando pese a que no arregle contrato.