River Plate venció ayer a Gimnasia (J) por un ajustado 1 a 0, en el Monumental, y se colocó a sólo un punto del líder Instituto. David Trezeguet marcó el único tanto, de cabeza, a los 22 minutos del segundo tiempo y con esta victoria se mantiene en la firme pelea por lograr el ascenso directo y se alejó por tres unidades de Central, que hoy se mide con Huracán.
River aprovechó el inesperado empate de la Gloria (63 puntos) ante Brown de Puerto Madryn, en Córdoba, y recortó la distancia a una unidad con su triunfo ante los jujeños.
Para el próximo partido, ante Atlético Tucumán, de visitante, el equipo de Matías Almeyda no contará con el mediocampista Leonardo Ponzio, que sumó su quinta amonestación.
En forma merecida y con una dosis de sufrimiento, River se adueñó de los tres puntos con una aparición de Trezeguet, implacable en el juego aéreo, tras aprovechar un error de cálculo del arquero Maximiliano Cavallotti.
Los millonarios tuvieron el control del juego y las oportunidades desde el comienzo. Los jujeños le cedieron la pelota y el terreno, pero le costó a River concretar en la primera etapa, pese a contar con tres situaciones netas.
El defensor Juan Manuel Díaz tuvo dos ocasiones cuando cabeceó dentro del área chica y el arquero, de buen desempeño más allá de la falla en el gol, neutralizó los intentos.
Además, tras una pared con Leonardo Ponzio, Fernando Cavenaghi también estuvo cerca de la apertura del marcador con una definición por encima del travesaño.
Las características del segundo tiempo fueron las mismas que en la etapa anterior.
River, lanzado al ataque permanentemente, mientras que el Lobo jujeño, limitado a juntar futbolistas en defensa a la espera de algún contrataque que nunca llegó.
Almeyda realizó dos cambios tácticos al comienzo del segundo tiempo que le dio su rédito. El uruguayo Sánchez —de poca productividad— fue suplantado por Ocampos, que le dio potencia y llegada por derecha del ataque a los locales.
Mientras que Cavenaghi —lesionados en su pierna derecha— fue reemplazado por Alejandro Domínguez, quien gestó la acción del gol con un desborde por la derecha.
A pesar del triunfo legítimo y justo, River tuvo que sufrir para lograr el objetivo de quedar cerca de Instituto, que desperdició una buena oportunidad de mantener la ventaja de tres puntos.
El millonario sigue dando pelea y busca dar el paso del ascenso directo para regresar a primera división. No tenía que dejar pasar la chance de acortar distancias con Instituto y lo consiguió. Ahora quedan seis finales más en un torneo que se torna atrapante, pero cargado de tensiones.