El seleccionado argentino, respaldado en el astro Lionel Messi, consolidó el proyecto del DT Alejandro Sabella a fuerza de buenos resultados en amistosos y eliminatorias, lo que encaminó la clasificación al Mundial de Brasil 2014.
El seleccionado argentino, respaldado en el astro Lionel Messi, consolidó el proyecto del DT Alejandro Sabella a fuerza de buenos resultados en amistosos y eliminatorias, lo que encaminó la clasificación al Mundial de Brasil 2014.
Luego de un comienzo de ciclo adverso, con marcadores inesperados en eliminatorias, como la primera derrota en la historia frente a Venezuela y el empate con Bolivia de local, el triunfo ante Colombia en Bogotá, como cierre de 2011, preanunció un buen 2012.
El primer partido fue el 29 de febrero ante Suiza en Berna, donde el seleccionado ganó por 3-1 con el primer hat-trick de Messi con la casaca albiceleste.
Aquella vez, Sabella elogió al crack rosarino, consideró "una bendición" su participación en el equipo y logró rodearlo exitosamente con futbolistas dotados técnicamente como Angel Di María, Gonzalo Higuaín, Fernado Gago y Sergio Agüero para realzar sus extraordinarias condiciones.
A partir de 2012, el ex DT de Estudiantes también diagramó el listado de jugadores que serían parte de su confianza en el esquema futbolístico, en el que nunca tuvo espacio Carlos Tevez. "Cuando elijo un grupo de jugadores, es difícil que cambie", afirmó Sabella parado en sus convicciones.
Con Messi como símbolo, capitán y figura, Argentina ganó confianza en cada una de sus actuaciones y el poderío ofensivo de sus "Cuatro Fantásticos" (los rosarinos, Higuaín y Agüero) disimuló el mal endémico del equipo en los últimos tiempos: los problemas defensivos.
Esa característica del seleccionado argentino fue una constante que se tradujo en las victorias 4-3 ante Brasil (amistoso disputado el 9 de junio en New Jersey con una brillante actuación de Messi, nuevamente autor de tres goles) y 2-1 frente a Chile (16 de octubre por la 10ª fecha de las eliminatorias en Santiago).
El equipo de Sabella deslumbró goleando 4-0 el 2 de junio a Ecuador en River, y cosechó elogios en el 3-1 en Frankfurt ante Alemania del 15 de julio, y el 3-0 a Uruguay en Mendoza, el 12 de octubre, siempre con Messi como figura.
Alrededor del jugador por ahora triple ganador del Balón de Oro (2009, 2010, 2011), Sabella supo conseguir lo que otros entrenadores como Alfio Basile, Diego Maradona o Sergio Batista no pudieron: convertir al crack rosarino en figura excluyente.
Sin embargo, el seleccionado aún debe corregir la proyección y la marca en los laterales, que durante el año ocuparon Pablo Zabaleta, Marcos Rojo, Hugo Campagnaro y Clemente Rodríguez. También el auxilio de los mediocampistas cuando algún marcador pasa al ataque.
El equilibrio, concepto insoslayable del manual futbolístico de Sabella, aún no luce en la dimensión pretendida por el DT y los riesgos de una derrota por descompensación sobrevuelan en cada presentación del equipo.
A su vez, la apuesta de Sabella por los centrales Federico Fernández y Ezequiel Garay aún no encontró su mejor versión, pero el entrenador confía en que son los futbolistas que en la actualidad le pueden garantizar seguridad con el transcurso de los partidos.
La selección argentina también dispuso de la conformación de once titulares del medio local que enfrentaron a Brasil en el "Superclásico de las Américas", perdido por penales luego de una derrota 2-1 en Goiania y una victoria por igual marcador en La Bombonera que terminó con el ciclo de Menezes en el scratch.
A pesar de los resultados, Sabella pudo sacar conclusiones, trabajar y conocer otros futbolistas que también se ganaron su consideración y formaron parte del plantel en las eliminatorias sudamericanas. Entre ellos figuran el volante de Inter Pablo Guiñazú, el delantero de Palmeiras Hernán Barcos y el defensor de Vélez Sebastián Domínguez.
El último encuentro amistoso, con figuras europeas, arrojó un discreto 0-0 ante Arabia Saudita en Riad, el 14 de noviembre, que no le quitó mérito a la campaña realizada durante el año.
Los dirigidos por Sabella finalizaron en el primer lugar de las eliminatorias con 20 puntos, con tres de ventaja sobre Ecuador, y con Higuían y Messi en la cima de la tabla de goleadores con 7 conquistas junto al uruguayo Luis Suárez.
A poco más de un año del Mundial, el entrenador pulirá aspectos y detalles durante 2013, gracias a lo obtenido durante este año, con la explosión de Lionel Messi, la figura que supo rodear, contener y potenciar en busca del equilibrio colectivo tan anhelado.