El cuerpo técnico rojinegro decidió dividir en dos turnos la jornada de
entrenamiento de hoy. La decisión no es antojadiza. Porque el objetivo es poner en un tubo de
ensayo la movida posicional que desvela por estos días a Caruso Lombardi para visitar el sábado a
Vélez, a las 21.10 y con el arbitraje de Diego Abal.
De ahí que el entrenador leproso convocó a dos grupos. De
los elegidos para presentarse a las 9.30 en Bella Vista puede deducirse que saldrá la formación
titular con sus correspondientes variables.
El grupo A: Villar, Ré, Schiavi, Spolli, Quiroga, Cabrera,
Bernardello, Scotti, Donnet, Da Silva, Salcedo, Gutiérrez, Torrén, Pérez, Vangioni, Ferreyra,
Zapata, Seri, Mainguyague, Vázquez, Torres y Rivera. Estos tres últimos también concurrirán a la
tarde para seguir sumando minutos de fútbol.
El grupo B: Aguilar, Fideleff, Gaitán, Llama, Hoyos,
Sperduti, Vranjicán, Vaca, Formica, Steinert y Payer.
La pretensión de Caruso Lombardi es ordenar una hora de
fútbol. Tal vez arranque con la formación que venció a Racing en el Coloso y luego cambie sobre la
marcha. Ayer no largó prenda sobre esto y sólo adelantó: "Voy a utilizar la práctica para probar el
nuevo esquema que tengo en mente. Ustedes (por los periodistas) me conocen muy bien y saben que si
no me conforma lo que veo en un entrenamiento de fútbol doy marcha atrás. Tampoco voy a hacerme el
héroe justo ahora y contra Vélez. No soy partidario de jugar con un solo delantero, pero el
encuentro del sábado hay que analizarlo muy bien. Igual, no soy de arrepentirme de las cosas que
hago. Una vez que me decido le doy para adelante. Les aconsejo que no se la jueguen con ningún
nombre. Esperen hasta que vean el equipo que paro en los entrenamientos", ironizó el conductor.
Habrá que creerle nomás a Caruso. Ya dio sobradas muestras de que no se
casa con nadie. Tampoco le tiembla el pulso para sacar a un jugador de rendimiento aceptable. Mucho
más si se tiene en cuenta que el domingo el equipo no cumplió con una actuación para tirar manteca
al techo. l