Dos hermanos. Un podio. Dos medallas y una misma alegría. En pocas palabras se puede resumir el importantísimo logro de los hermanos Giorgis, Tobías e Ignacio, quienes ayer fueron de bronce y plata, respectivamente, en la final de figuras de esquí náutico. Tobi, de 15 años, y Nacho, de 17, compartieron la premiación a la vera de la represa La Angostura-Cabaña del Arquitecto Laguna que los hermanó aún más que la sangre y que les dio una alegría extra: la de saber que la consecución llega en mayores, aún siendo ellos muy chicos, en el debut de ambos en el certamen.
"Es la primera vez que venimos a los Juegos Odesur y la verdad es que comenzar con un bronce es de lo mejor", dijo un tímido Tobías a las cámaras de TyC Sports, la señal de cable que cubre el certamen. Y su hermano agregó a la hora de describir cómo se desarrolló la competencia: "Estuvo bastante ventoso y eso hizo que se condicionara un poco a los atletas, pero pudimos salir adelante y hacer lo que sabemos".
Desde Roldán, lugar de emplazamiento de la familia Giorgis, muy cerca del lago en el que Tobías le dijo a su papá Germán, siendo muy chico, que quería ser campeón del mundo, habló justamente Germán: "Imaginate, para mí esta es una alegría completa, tener a dos hijos en el mismo podio...". El papá de Tobías y Nacho, pero también de Francisco, quien viene haciendo camino un poco más atrás con sólo 10 años, entendió también su felicidad en el hecho de haber sido él capitán del equipo argentino de esquí náutico en los Juegos de Santiago 2014. Y por tanto, sabe dimensionar la competencia.
Entendido en la causa, al igual que su hijo Nacho, contó que las condiciones en las que compiten los chicos no son las ideales "porque es una laguna muy abierta en la que hace frío y hay mucho viento (...) también la altura influye, por supuesto, en el cansancio, en el oxígeno y se salta menos por ejemplo".
Germán resaltó que por la edad, la idea era que sus hijos tomaran experiencia en los Odesur, pero la jugada terminó saliendo mejor. De hecho, Tobías entró también a la final de salto (5º) y Nacho a la de slalom (4º). Hoy ambos tendrán la pelea por el podio en overall. Aunque el plan es no "arriesgar" más allá de lo justo, ya que Tobías, en su caso, deberá afrontar en agosto el Mundial juvenil en España, en el que tiene depositadas grandes expectativas.
Según explicó papá Germán, el promedio de un saltador en edad de mayores es de 57 kilómetros, mientras que por su edad los hermanos recién alcanzan unos 51. Pese a ello, las vivencias y el roce pasan a ser lo más valioso. En figuras, en cambio, donde los chicos se subieron al podio "el nivel de por sí es parejo y en condiciones que no son buenas, aún más. Porque cundo eso sucede se iguala hacia abajo. En esta laguna se movía mucho el agua", contó Germán, el más contento de todos.
Tras la obtención de la medalla y a la hora de enviar las respectivas dedicatorias, Ignacio tiró: "Mi papá debe estar muy contento, es el que más loco se pone". Su hermano Tobías lo apoyó en la moción y un rato después Germán, entre risas, le reconoció a Ovación: "Sí, me mandaron al frente". Es que hace casi 10 años arrancó el sueño de todos los esquiadores Giorgis en el alto rendimiento, más o menos por allí cuando Tobías dijo que quería ser campeón del mundo. Era un nene, pero le tomaron el deseo a rajatabla. Mamá es más tranquila, según parece.
Los chicos, junto a Violeta Mociulsky, quien también se colgó medalla (ver apoyo), agradecieron desde Cochabamba al entrenador nacional Javier Julio, hombre reconocido en la materia si los hay. Julio no pudo viajar pero los hermanos Giorgis enviaron la atención, al igual que las gracias para las familias, sponsors, gobierno provincial y Enard, el mayor sustento de los deportistas argentinos de alto rendimiento. Su papá no quiso olvidarse del Colegio Los Arroyos, que les permite viajar para competir.
Tobías y Nacho, si bien se entrenan solos bastante tiempo, tienen equipos de trabajo en EEUU y Chile, según donde se encuentren practicando. En Rosario, ese plantel para optimizar al máximo el rendimiento está compuesto por el preparador físico Juan José Fortuna, el kinesiólogo Juan Cruz Sánchez Almeyra y los médicos Iván Yelín, Gonzalo Bonadeo y Fernando Bachi. La psicóloga deportiva es Irene Presenqui, árbitro internacional de hockey que próximamente dirigirá el Mundial de damas en Londres.
"Todos ellos están en estas medallas", dijeron a la hora de reconocer el mérito de cada parte.
Un gusto Maestro
Hace muy poco, Tobías Giorgis se dio otro gustazo. Inmenso. El de ser partícipe del Torneo de Maestros, en Atlanta, EEUU, al que se llega sólo por invitación. Y por estar entre los mejores del mundo, claro. El convite, por sí solo, ya era un logro inmenso para el deportista que lleva la bandera de Rosario por el mundo. Pero no se conformó con ello y se colgó la medalla de bronce, en junior, en overall.
Tres bronces más en un mismo día
Si bien al esquí náutico le quedan medallas por repartir hoy, ayer fue una excelente jornada para los representantes argentinos. Es que además de los logros de los hermanos Giorgis también se sumaron los bronces de Violeta Mociulsky en figuras y de Paloma Giordano y Martín Malarczuk en slalom. Hoy será el último día de competencia de este deporte que tiene lugar en la represa La Angostura.