Omar De Felippe preservó a los futbolistas que eran habituales titulares para el partido contra Argentinos con la intención de no arriesgarlos y que estén en condiciones de jugar el clásico por la Copa Argentina. Nadie es capaz de asegurar a dos días del enfrentamiento contra Central cuál será la formación titular. Conociendo la manera de actuar del entrenador, el dibujo táctico 4-2-3-1 no se modificará. Nunca lo varió para el inicio de un partido. Los nombres tampoco serían una sorpresa. El único sector donde no es posible tener certezas es en la zaga central. El desempeño de Teodoro Paredes de primer central ante Argentinos fue una buena señal y quizás haya convencido al DT de que tiene que jugar. Si el elegido es el paraguayo, Stéfano Callegari le dejará el lugar, siendo Fabricio Fontanini el restante zaguero.
Un rato después del triunfo sobre Argentinos, De Felippe planteó la duda sobre el futbolista que elegirá para que sea el primer central en la copa, Paredes o Callegari. También habló de la posibilidad de que ambos sean los zagueros y entonces Fontanini vaya al banco. No hay chance de esto. Fontanini es valorado por el entrenador y será titular. El dilema pasa por el compañero.
La decisión que adoptó el entrenador para el encuentro ante Argentinos, ubicando a Paredes de primer central y desplazando a Callegari de ese puesto al de segundo central es una señal de que quería comprobar cómo respondía el paraguayo. Cuesta imaginar que si tenía la certeza de que Callegari es el apropiado para el clásico, no lo mantuviera como el último hombre, para que adquiera mayor regularidad.
Ninguno defeccionó el lunes. Paredes cerró bien a espaldas de los compañeros y Callegari prevaleció en el mano a mano que mantuvo con Gastón Verón. Como ambos rindieron, no están descartados para el encuentro ante Central. La diferencia que le saca Paredes a Callegari para convertirse en el acompañante de Fontanini es la experiencia. Es una condición que De Felippe valora, más aún para un partido de estas características.
Paredes inició el torneo siendo el titular, junto a Fontanini, y sobresalió en su segundo partido, contra Independiente (2-2) en el Coloso. El desgarro en el sóleo de la pierna izquierda lo dejó afuera para las siguientes fechas y entonces entró Callegari. El paraguayo se recuperó, pero debió esperar en el banco. Recién jugó su tercer encuentro el lunes pasado.
La tranquilidad con la que se desenvuelve para salir desde el fondo es una cualidad valiosa para jugar un clásico, donde la tensión y los nervios son sensaciones habituales. Algunos prefieren desprenderse de la pelota cuanto antes para no cometer ningún riesgo. Paredes, en cambio, se toma su tiempo, aunque la termine revoleando.
Callegari creció con respecto a los primeros partidos, conserva mejor la posición y acomoda de manera más adecuada el cuerpo para disputar la pelota con los rivales. Pero tiene altibajos, y en un partido eliminatorio es difícil pensar que De Felippe asuma riesgos con él. Paredes responde mejor a lo que espera el entrenador. Está mejor preparado para no achicarse ante todo lo que rodea este encuentro.
Los otros diez puestos del equipo no cambiarían con respecto al o que venía jugando previo a Argentinos. Más allá de que Alfio Oviedo anotó un gol contra el bicho, Luis Leal es el delantero titular.
El plantel entrenó ayer y viajó por la tarde a Buenos Aires para instalarse desde ayer por la noche en esa ciudad. Los jugadores que forman parte de la delegación no fueron informados por el club, así que por el momento no se tiene certeza exacta de quiénes son. Más allá de ese hermetismo que mantiene De Felippe, con el que acostumbra a manejarse el cuerpo técnico, los nombres de la formación titular no sorprenderían a nadie.