"Es algo que no me esperaba para nada". Si el protagonista lo dice... Javier Pinola fue convocado ayer por Edgardo Bauza para sumarse a la selección nacional que hoy viajará a Bolivia (hará base en Santa Cruz de la Sierra) para jugar mañana ante el equipo del altiplano. Después de lo que fue la victoria frente a Tigre, el defensor canalla fue notificado por parte del cuerpo técnico albiceleste. Ayer a la mañana viajó rumbo a Buenos Aires y por la tarde participó del entrenamiento en el predio de la AFA en Ezeiza.
La ausencia de algunos defensores (Mercado y Otamendi) ya habían diezmado al seleccionado. Pero Bauza se tomó algunos días más para esperar a Emmanuel Mas, quien ante Chile tuvo que dejar la cancha antes del final por un esguince de rodilla. Ayer el ex San Lorenzo fue desafectado y por eso el Patón se vio obligado a salir en busca de otro intérprete.
¿Está en la mejor condición física y futbolística Pinola? Para Bauza sí. En caso contrario no lo hubiera citado. Pero el propio Pinola fue quien dijo que no esperaba que esto sucediera. Es que el ex Nüremberg hizo su reaparición en el fútbol grande de la Argentina luego de 10 meses de inactividad. Fue titular en los tres partidos (Godoy Cruz, Quilmes y Tigre) que Central lleva disputados en 2017.
Su desempeño en estos tres compromisos estuvieron dentro de los parámetros normales. Tuvo una buena actuación contra Godoy Cruz, cuando mostró la solidez habitual y fue uno de los puntos más altos del equipo de Montero. No ocurrió lo mismo ante Quilmes, encuentro en el que se lo vio algo más errático y con algunos titubeos propios de la falta de ritmo de competencia. El sábado, otra vez en el Gigante, tampoco fue el Pinola que los hinchas estaban acostumbrado a ver, especialmente con la pelota en los pies, errando varios pases. Claro que todo esto es una especie de redebut para el zaguero, quien la peleó duro durante los 10 meses en los que estuvo inactivo producto de dos cirugías en la tibia derecha, tras aquella fractura en el partido ante Atlético Nacional de Medellín por la Copa Libertadores primero y una fisura en el mismo hueso después.
La relación de Pinola con la selección nacional no es nueva. Ya tiene un par de antecedentes. El primero data de un amistoso frente a Argelia, en Barcelona (el equipo albiceleste se impuso por 4 a 3), el 5 de junio de 2007, con Alfio Basile como entrenador. Después de eso llegó el llamado de Gerardo Martino, en estas eliminatorias sudamericanas, y con la particularidad de que fue para la doble fecha que incluía también los partidos contra Chile (en Santiago) y Bolivia (en el Mario Kempes).
Contra la Roja, Pinola estuvo en el banco de suplentes pero no tuvo la chance de ingresar. Lo del partido ante Bolivia fue totalmente distinto. Nicolás Otamendi y Ramiro Funes Mori fueron amonestados en Chile (ese día la defensa formó con Mercado, Otamendi, Funes Mori y Rojo) y debían cumplir una fecha de suspensión. Fue lo que obligó al Tata a meter mano en el equipo. Uno de los apuntados fue Martín Demichelis. Y el otro el mismísimo Pinola. Sobre las puntas volvieron a estar Mercado y Rojo.
"Enfrente hubo un rival inofensivo, pero el defensor canalla pasó el examen como para ser citado a la Copa América del Centenario en Estados Unidos", fue parte de la crónica de Ovación (ver facsímil) sobre lo que había sido la actuación de uno de los pilares de la defensa canalla por entonces.
El pasado martes, posterior a la victoria contra Quilmes, Pinola fue consultado sobre si aún se sentía cerca de la selección y si una nueva convocatoria estaba dentro de sus prioridades. En tal sentido, el defensor dijo: "Mi próximo objetivo era hacer fútbol, que es lo que estoy haciendo. Mis metas a corto plazo son seguir ayudando al equipo y lógicamente el sueño de la selección lo tengo. No tuve contacto, pero no es algo por lo que me haya preocupado demasiado porque debía demostrarles a mis compañeros en Central que estaba bien y que podía volver a ayudar".
Cinco días después y sin esperarlo llegó el llamado por parte del Patón Bauza, como hace un año sucedió con Martino. Es cierto que la convocatoria apareció por la baja de varios futbolistas, pero para Pinola cuenta que está otra vez en la consideración del cuerpo técnico de la selección. Y hoy el defensor canalla ya es uno más en el campamento del Patón en Ezeiza. Para Pinola, la selección.
"Una alegría inmensa que no me entra en el cuerpo"
Mientras viajaba a Buenos Aires, Javier Pinola atendió el llamado de Ovación. Y a horas de sumarse al grupo en Ezeiza, el defensor dejó algunas frases sobre las sensaciones que le habían producido el llamo del Patón Bauza. "Es un orgullo enorme y una alegría inmensa que no me entra en el cuerpo", destacó el zaguero.
"Era algo que no me esperaba para nada, pero en un mes y medio me cambió todo. Pasé 10 meses durísimos, pero hoy puedo ver las cosas de otra manera. No puedo no mencionar el apoyo que siempre tuve de mi familia y de todos los amigos, que siempre me dieron una voz de ánimo para no bajar los brazos. Y fundamentalmente de mis compañeros, que sufrieron a la par mía. A todos les estoy recontraagradecido por todo lo que me ayudaron y siempre se los remarqué", dijo. Y agregó: "Este es un premio para todos, que me toca disfrutar a mí, pero cada uno de ellos están acompañándome y jamás voy a terminar de agradecerles todo esto. Que me llegue otra chance a esta edad es hermoso y voy a tratar de aprovechar cada minuto para seguir aprendiendo al lado de los enormes jugadores que hay hoy en la selección", finalizó.