Pablo Lima levanta la cabeza y no se amilana. No se asusta con el promedio, ni tampoco con el
próximo rival. El lateral uruguayo confía plenamente en las chances de Central para lograr un
triunfo el sábado, a las 21.15, ante Huracán en Arroyito. El conjunto de Angel Cappa, la sensación
del torneo que viene de vapulear a River, no representa un escollo insalvable en el camino del
marcador de punta. “Huracán es un buen equipo, con buenos jugadores y viene bien. Pero
tenemos fe en lo nuestro. No tengo dudas de que le podemos ganar”, destacó Lima ayer tras la
práctica en Arroyo Seco.
—¿Cómo se le juega a Huracán?
—Como jugamos el primer tiempo con Lanús. De esa forma vamos a
andar bien y tenemos grandes posibilidades de ganar.
—¿Encontrás similitudes entre Lanús y Huracán?
—No. Huracán puede ser el equipo sensación pero en casa tenemos
que hacernos fuertes. Son armas que hay que poner en práctica en este momento.
—¿Hubo un bajón físico en el segundo tiempo contra los
granates?
—No, estamos muy bien físicamente. Cometimos errores, le cedimos
mucho terreno y de esa manera Lanús lastima mucho.
—¿Huracán es el mejor equipo del campeonato?
—No, es un buen equipo. Que tiene buenos jugadores y viene bien.
Pero tenemos fe en lo nuestro y nos vamos a plantar para buscar el triunfo. No tengo dudas de que
le podemos ganar.
—¿Se achicó el margen de error con la derrota ante
Lanús?
—Obvio. Pero creemos que dependemos de nosotros, eso es muy
importante. El partido con Huracán va a marcar mucho el futuro.
—¿Dependen sólo de ustedes?
—Si nosotros ganamos, los otros resultados se van a dar. Sumar de
a tres es fundamental. A pesar de que nos quedamos en el segundo tiempo, hicimos un buen partido
con Lanús. Pero en la lucha que está Central eso no cuenta, hay que conseguir resultados positivos.
—¿Cómo analisás la fecha?
—Nos favoreció un poco la derrota de Racing. Si ellos ganaban se
despedían de todo.
—¿Cómo quedó el equipo tras la primera caída en la era
Russo?
—No hay que perder el tiempo. Es momento de solucionar los errores
y dejar todo por lo que tenemos por delante. Es tiempo de decidir el futuro de la institución.