Con mucha autoridad y solvencia, haciendo de su cancha un bastión infranqueable y sacando chapa
de serio candidato, Newell's despachó al ordenado y peligroso Tigre por 2 a 0, en partido
correspondiente a la 9ª fecha del torneo Apertura.
Con los tres puntos en el bolsillo, los rojinegros llegaron a las 17 unidades, igualaron la
línea de los de Victoria y son los únicos escoltas de San Lorenzo, el puntero del torneo.
De entrada nomás, los de Gamboa marcaron presencia y le hicieron sentir el rigor de la
presión asfixiante en el medio y la vocación ofensiva permanente. Pero no lastimaba Newell's,
probaba de media distancia y si no moría en el borde del área.
Y enfrente Tigre avisaba que era un hueso duro de roer, porque en dos escapadas de Giménez y
Morel, Peratta tuvo que esforzarse para aventar el peligro. Pero los rojinegros iban con
convicción. Vangioni por izquierda fue una permanente llegada con peligro y Diego Torres por
derecha le ponía esa explosión necesaria. Y además del prolijo trato de la pelota, estaba Fabbiani.
El Ogro marcó la distinción del partido con dos jugadas de potero puro. Las dos fueron goles.
En la primera se la sirviói de pecho dentro del área a Diego Torres para que con remate superara la
estirada de Islas.
Y cuando la etapa ya moría, Fabbiani la puso contra la suela en tres cuarto, se llevó a dos a
la rastra, eliminó a un tercerom que le salió y volvió a pasar a otro más. Ya frente al arquero,
levantó la cabeza y vio que Vangioni entraba solo y libre, y le dijo tomá, hacelo. El Coloso deliró
y la gente, que se llenó los ojos de fútbol del bueno, cantó con más fuerza que nunca.
El segundo tiempo casi estuvo de más. La victoria no peligró nunca, primero porque la
reacción de Tigre nunca se terminó de definir por más que se haya adelantado un poco en el terreno,
y segundo por la solvencia rojinegra, que hizo correr el balón y dominó a voluntad el trámite del
encuentro.
Hubo algunas esporádicas estocadas de los del Parque, que apretaron el acelerador en algunos
pasajes aunque más no sea para demostrar que eran los dueños del partido.
Hubo también una interrupción del encuentro por la canttidad de bengalas con las que la
hinchada rojinegra iluminó el andar de su equipo. Hubo cambios para el premio de la ovación y allí
el Ogro Fabbiani se quedó con todos los aplausos.
Newell's ganó con autoridad y quedó como escolta del único líder San Lorenzo. Y el sueño está
intacto y la gente se fue con los ojos llenos de fútbol, sobre todo en el primer tiempo.