“Soñar no cuesta nada”, dice el refrán. Y estos chicos de la reserva de Newell’s le hacen honor a esta frase. Porque había que ser muy optimista para pensar que estos pibes se iban a colar entre los cuatro mejores del torneo hace un par de meses, cuando el 12 de marzo pasado perdieron 2-1 con casi el mismo plantel ante Defensa y Justicia como visitante, en la 5ª fecha. Habían quedados últimos en su zona con un sólo punto, producto de un empate (2-2 ante Talleres) y cuatro derrotas. Pero el grupo nunca perdió la fe ni la fuerza de trabajo. Las pelotas que antes pegaban en el palo y se iban afuera comenzaron a entrar y los resultados dieron un giro de 180 grados. A tal punto que luego de aquella derrota en Florencio Varela, Newell’s sacó 25 puntos de los últimos 27 (ganó 8 y empató ante Gimnasia en La Plata) y hoy lo encuentra en semifinales tras el triunfazo de ayer por 2 a 1 ante Estudiantes.
Los primeros 15 minutos ante el pincha fueron como los primeros rounds de una pelea de boxeo. Con los dos contrincantes estudiando los movimientos del rival y preocupándose por lo que hacía el otro. Eran dos equipos muy largos e incluso tardaban entre 15 y 20 segundos en hacer un lateral, lo que atentaba contra un juego dinámico.
En aquel primer tercio de la etapa inicial, Newell’s intentó algún que otro ataque más por el lado derecho con Lucio Urquía que con Martín Luciano, a quien en esos minutos le tocó bailar con la más fea porque Estudiantes aglutinaba sus intentos ofensivos por ese sector, a través de su mediocampista Vinicius Lansade, quien con algunas maniobras personales abastecía a los delanteros.
Hasta que llegó el minuto 18 y hubo un quiebre en el partido. Ya que lo que era un problema para Newell’s, como lo fue la temprana lesión del marcador central Valentín Benítez, se transformó en una solución. No porque el defensor leproso haya estado haciendo un mal partido. Sino porque esos minutos de estudio de ambos equipos fueron muy bien aprovechados por el cuerpo técnico leproso para sacar ventaja en el resto del cotejo.
Hay partidos en los que las decisiones de los entrenadores afectan de manera positiva o negativa el resultado. Y en este caso, la lectura que hizo el cuerpo técnico comandado por Federico Hernández, bien secundado por Gustavo Arciprete, fue clave para que el desarrollo del cotejo tome otro rumbo.
Porque hubiese sido muy fácil, tras la lesión de Valentín Benítez, hacer puesto por puesto y mandar a la cancha a otro marcador central como Felipe Coronel. Pero no. Newell’s arriesgó con el ingreso de Misael Jaime, quien ya tuvo minutos en la primera con el Mono Burgos, y eso implicó un rotundo cambio posicional de piezas.
Porque Maccari, un volante central con mucho juego y quite, pasó a la zaga central, mientras que Marcos Benítez y hasta el mismo Guillermo Balzi tomaron obligaciones más defensivas para ayudar a Braian Rivero y potenciar el juego del Mono Jaime.
Y eso le dio buenos dividendos. Ya había avisado a los 30’ con un remate de Marcioni que pegó en el palo. Y a los 35’ vino la apertura del marcador a través de un tiro libre de Juan Pablo Freytes, quien también fue uno de los puntos altos del partido. Cinco minutos más tarde la lepra tuvo para liquidarlo, pero Ramón Bravo no llegó a conectar un centro luego de una buena corrida de Marcioni.
En el segundo tiempo, Estudiantes con más obligaciones, salió a buscar el empate. Newell’s no pasaba grandes sofocones pero a los 57’ Franco Romero hizo un golazo luego de una buena maniobra personal de Franco Zapiola. Fueron minutos de zozobra para Newell’s, lo que implicó otra buena decisión del técnico Hernández, quien mandó a la cancha a Marco Campagnaro en lugar del delantero Bravo, resignando gente en ataque, pero no por volumen de juego.
Desde allí Newell’s volvió a crecer y a generar situaciones. Llegó con un remate de Marcos Benítez (64’), otro de Martín Luciano (68’) y un cabezazo de Maccari (73’), que encontró al arquero Zapiola bien ubicado.
Hasta que a nueve minutos del final una jugada colectiva fue a parar en los pies de Misael Jaime, quien asistió a Balzi para decretar el gol del triunfo.
En los últimos minutos, Newell’s lo supo controlar. El partido pedía piernas nuevas y Hernández cerró el cotejo haciendo un doble cambio. Ingresó Esponda por un extenuado Rivero y mandó a Funez, un centrodelantero alto y potente, sacando a Jaime, el jugador que más pesó en el partido. Triunfo justo y trabajado de Newell’s, que ahora en semifinales tendrá una parada brava ante Boca para seguir soñando con el título.
Síntesis
Newell’s 2: Macagno; Urquía, Valéntín Benítez (19’ Misael Jaime) (86’ Funez), Freytes y Luciano; Braian Rivero (86’ Esponda), Maccari, Marcos Benítez y Balzi; Marcioni y R.Bravo (63’ Campagnaro).
DT: Federico Hernández
Estudiantes 1: Zozaya; Rodríguez, Kociubinski, Núñez y Benedetti (85’ Spetale); Lansade (79’ Villalva), Franco Romero, Desio y Palavecino (46’ Obregón); Zapiola y Naya (72’ Guzmán).
DT: Pablo Quatrocchi
Goles: 31’ Freytes (NOB), 57’ Franco Romero (E), 81’ Balzi (NOB)
Arbitro: Hermes Gigante / Estadio: Marcelo Bielsa
Así serán las semifinales
Newell’s enfrentará a Boca (le ganó 2-1 a Godoy Cruz) en una de las semifinales. La otra será entre River Plate, que venció 3 a 2 a Independiente, frente a Sarmiento, que venció 3-2 sobre la hora a Argentinos Jrs.