Una cosa es querer y otra poder. O, tal vez, usar el ingenio para obtener lo prioritario. Todo un combo que refleja que por un lado están las "necesidades" y por el otro la "realidad". Newell's nuevamente está en ese camino que tantas veces transitó y chocó contra lo económico (más allá de los paraguayos que llegarán, ver página 3), ese que desde hace un largo tiempo intenta sobrepasar. Y es ahí cuando el club ingresa en un terreno con escasas salidas, ocultas y que debe encontrar para llegar a cumplir. Es ahí cuando aparece Omar De Felippe, quien con toda razón exige algo mejor de lo que tiene porque desea cierto protagonismo en el campeonato que se viene. La dirigencia, por su lado, intenta bucear en el mercado prácticamente sin dinero y aplicando la táctica de la seducción. Es lo que realiza con resultados, hasta el momento, no óptimos de acuerdo a lo que sostiene públicamente el entrenador.































