Habló el capitán. Y ratificó su liderazgo en Barcelona. Leo Messi no jugó la Copa Joan Gamper que terminó adjudicándose el culé ante Arsenal (ver aparte) porque recién ayer se sumó a los entrenamientos. Pero fue el principal orador a la hora de presentar al plantel culé. Entre las frases más salientes que exteriorizó el rosarino más destacado sobresalió una. "La verdad es que es difícil decir algo hoy después de la temporada pasada. No me arrepiento de nada”, dijo la Pulga desde las entrañas del Camp Nou. En este lado del continente esas palabras fueron velozmente vinculadas como un mensaje subliminal a la sanción que le aplicó la Conmebol de tres partidos y una multa de 50 mil dólares. Sin embargo, el máximo referente del deporte más pasional del planeta se refirió netamente al mundo catalán.