Gran Premio de Australia. Primera fecha del campeonato mundial 2015. Lewis Hamilton largaba desde la pole. Su compañero Nico Rosberg a su lado. Así llegaron a la primera curva. Así terminaron. Esa fue la carrera circunscripta solo a los Mercedes, como viene ocurriendo desde todo el año pasado. La que fue más interesante fue la otra, la que no los incluye, donde se ve más paridad, aunque no por ello el espectáculo fue bueno. La Fórmula 1 abrió su temporada como terminó la anterior y eso es una muy mala noticia. Para colmo, al menos para toda Latinoamérica, y en especial Argentina, la alejaron de sus televidentes. Ergo, cada vez entusiasma menos y pierde popularidad. Además, ¡sólo partieron 15 autos! y en la primera vuelta quedaron los dos Lotus afuera.
Hubo 12 días de test en la pretemporada y sólo dos días los dominaron los Mercedes. ¿Estrategia? A la hora de la verdad, las Flechas de Plata no le dejaron nada a nadie y ni siquiera pudo haber lucha entre ellos, porque cada vez que Rosberg amagaba, Hamilton le aceleraba. Por eso fue 1-2 siempre y estuvieron en otra galaxia. Mejor dicho, siguen en ella. Tanto, que le sacaron una vuelta a Daniel Ricciardo, con el hasta el 2013 imbatible Red Bull, que terminó 6º.
El resto se achicó tanto que la grilla de partida, que el viernes se intuía de 20 autos, bajó a 18 tras la clasificación del sábado al no poder girar los dos Manor y a la hora de la luz verde sólo contó con 15. A Valtteri Bottas no le dejaron largar por un problema en la espalda. A Kevin Magnussen se le trabó la caja en la vuelta de instalación, en un fin de semana desastroso de McLaren en su vuelta con Honda (¡de lo que se salvó Fernando Alonso!). Y Daniel Kvyat se quedó de a pie por el motor mudo de su Red Bull, que hizo estallar al director deportivo Christian Horner, cargándole las culpas a Renault.
Detrás de los Mercedes, la incorporación de Sebastian Vettel a Ferrari y los cambios en su conducción renovaron la expectativa, pero el alemán luchó a brazo partido para ganarle el último escalón del podio a Felipe Massa y de hecho se lo arrebató en boxes, mientras que fue allí donde Kimi Raikkonen perdió sus chances en las dos paradas. Primero se trabó la rueda izquierda y luego no le ajustaron bien el tornillo de la misma goma, y le ordenaron parar.
Pero ni Vettel ni Massa ni Raikkonen fueron las estrellas de la categoría no-Mercedes, sino el debutante brasileño Felipe Nasr con el Sauber que fue centro de la polémica el viernes, por la presión que metió Giedo van der Garde para hacer respatar un contrato. Hizo una largada excelente y de 11º quedó 6º luego de atravesar los problemas de la primera curva, donde quedó de a pie Pastor Maldonado. Luego superó al otro debutante Carlos Sainz (9º,) y contuvo a Ricciardo sin problemas. El chico Max Verstappen, el más joven en debutar en la F-1 (17 años, 5 meses y 13 días), que estaba para ser 6º hasta que una fuga de aceite lo hizo detener. Hamilton y Rosberg sólo dejaron a Vettel, Massa y a Nasr sin sacarle una vuelta. La F-1 sigue sólo para dos.