Más allá de que Diego Maradona haya dado un golpe de efecto importante dándole
la camiseta número 10 a Lionel Messi, está claro que para el entrenador de la selección nacional su
principal referente dentro de la cancha es Javier Mascherano. El volante central del Liverpool, que
hizo sus primeras armas en Renato Cesarini, se siente halagado por esa preferencia pero en todo
momento ubica su discurso dentro de la cancha y no en los elogios que le propician de afuera,
aunque vengan del Diez. Entonces, no elude el tema, los agradece, lo mismo que los de la gente,
pero rápidamente se mete en la piel de lo que realmente importa: la hora del juego. Y en ese
sentido, resaltó el valor del triunfo, aunque haya sido ante Venezuela, sin dejar de ver algunas
cosas, como que al equipo le faltó velocidad en el primer tiempo, justo a lo que aspira el DT en la
era pos Riquelme.
Al igual que con varios jugadores, Maradona resaltó
especialmente el trabajo de Mascherano y el volante le dio dimensión. "Me pone contento cuando se
valora el esfuerzo de uno. Yo trato de hacer lo mejor para el equipo, después si se valora mucho
mejor", remarcó el volante de Liverpool en diálogo con Ovación y con otros medios. Igual, siempre
muy ubicado, cuando otro periodista remarcó que fue el más aplaudido de la noche, el hombre de la
vecina localidad de San Lorenzo retrucó rápido: "No, el más aplaudido de la noche fue Diego".
—¿Que la gente te haya ovacionado como lo hizo tiene
mucho que ver con el mensaje de Diego, de que el equipo es Mascherano y diez más?
—No creo. Siempre me sentí querido por la gente y
trato de no tener problemas con nadie. Busco hacer mi humilde trabajo y nada más.
—¿No notás un mayor reconocimiento a partir de esas
declaraciones?
—Puede ser, pero lo primero que está en mi mente es
hacer las cosas bien para el equipo. Como dije, después si se valora mucho mejor.
—¿Al partido lo fueron trabajando de a poco?
—Hablamos de que era fundamental tener paciencia.
Contra estos equipos no hay que descontrolarse y creo que hicimos lo correcto. En el primer tiempo
nos faltó un poco de velocidad y en el segundo cuando la imprimimos hicimos la diferencia.
—¿Es una tranquilidad saber que arriba hay jugadores
que en cualquier momento convierten?
—Por supuesto. Es una tranquilidad para ellos y
también para nosotros el hecho de que hayan pasado tres partidos y que no nos hayan convertido
goles. Eso también genera confianza en cuanto al rendimiento defensivo.
—Pareció que hubo mucho espacio entre las líneas.
—Buscamos con insistencia el arco rival y pudimos
quedar algo desprotegidos en alguna contra. Venezuela casi no generó situaciones.
—¿Qué pensás de jugar en la altura de La Paz?
—No jugué nunca, así que no tengo una opinión
formada, pero debe ser como dicen todos los que alguna vez estuvieron ahí. Esperemos que no nos
afecte tanto.
—¿Van a buscar el partido allá?
—Queremos ganar porque los seis puntos nos darían
mucha tranquilidad para afrontar el resto de la eliminatoria. Ganar en La Paz nos dará un salto
importante en la clasificación. Igual va a ser un partido durísimo y hay que ver el desarrollo del
trámite para ver si nos favorece otro resultado también.
—¿Cuál es la mejor manera de jugar en La Paz?
—Lo que hablamos es que hay que llevar el control del partido. Si se
lo damos a Bolivia, con la altura nos va a complicar. l