Tras el duro traspié que sufrió el canalla, no solo por el resultado sino fundamentalmente por las formas, hasta el Padre Ignacio se expresó hoy sobre esta situación, sentenció que estaba "triste" por la "injusticia", aunque se mostró "orgulloso" por lo que hizo Central.
“Los felicito de corazón, no ganaron el partido pero se ganaron el corazón de la gente”, argumentó Ignacio, quien agregó en diálogo con Radio 2 que "felicito a los jugadores corajudos de Central que dieron todo para disfrutar el deporte”.
También sentenció que el penal fue un acto de discrimianción y violencia, todo lo contrario a lo que debe encarnar el deporte, que "debe trasmitir paz y alegría”, admitió en declaraciones periodísticas.
Pese a lo ocurrido, el Padre también destacó la "caballerosidad" de los jugadores de Central y responsabilizó por la vergüenza que se vivió anoche en Córdoba a la Asociación de Fútbol Argentina (AFA) y a los directivos de Boca.